Desde hace rato hay buenos exponentes del hip hop nacional, algunos de los cuales han alcanzado éxito masivo. Sin embargo, ahora hay una camada que está colándose a la corriente principal

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En este país, el hip hop entró por la televisión. Fue gracias a uno de sus cuatro elementos, el breakdance, que ocupó espacios importantes en diferentes programas de nuestra tv. Héctor Suarez interpretaba en ¿Qué nos pasa? a “El Flanagan”, un heterodoxo punk que hacia el moonwalk y otros pasos de baile clásicos del break mientras sonaba “Kiss”, de Prince, y gritaba “¡Quereeeeeemos roooooock!”. En programas de variedades, como el de Manuel “El Loco” Valdés, también había breakdancers animando al público. Y en algo que, según recuerdo, se llamaba Disco Jack- son, diferentes crews se enfrentaban en batallas de baile.

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Fue hasta mediados de esta década cuando el hip hop, que ya casi cumplía 35 años de existir, se empezó a consolidar seriamente en México. En parte debido a la globalización cultural que inevitablemente se genera gracias al internet, y por el otro lado, creo yo, ayudó mucho la aplastante popularidad del trap y el reguetón que se está produciendo en diferentes locaciones de América Latina. Es el mismo idioma, pero hablado con otros acentos.

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Lo importante es que en este momento hay muchos artistas de hip hop nacional que vale la pena revisar. No creo que sea correcto señalar que se trata de una escena, pues aunque entre ellos hay algunas coincidencias, también hay muchas diferencias. Además, se mueven en distintas órbitas y le hablan a diferentes públicos. Lo que los une, principalmente, es que están haciendo música de buena calidad y que cada vez le hablan a públicos más grandes. Y estos son los que recomendamos en esta columna.

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Alemán

Voz rasposa sobre beats austeros pero contundentes es el sello de este extraordinario rapero de Baja California Sur. Ya se presentó en el Pepsi Center y sus discos acumulan millones de escuchas. Vale la pena Eclipse, álbum doble de 2018 en el que se transita del hip hop al trap con maestría.

Sabino

A falta de una mejor definición, diremos que Sabino hace un híbrido de rock, canciones románticas y rimas. No es un rapero tradicional, no presume de representar al barrio y no está buscando la credibilidad de la calle. Ni duro, ni rudo, sino más bien emo y con mucha imaginación y sentido del humor.

Gera MX

Este señor remite al hip hop de la vieja escuela, al utilizar sampleos de vinilos viejos, scratches y hasta excursiones por otros ritmos, como la cumbia. Está a punto de sacar —el 15 de julio— un excelente álbum en el que cuenta, entre otros colaboradores, con la presencia del gran Celso Piña.

Banda Bastön

Un dueto clásico del hip hop nacional. Cada disco que hacen es mejor. El nuevo, ETCÉ7TERA, es breve pero potente: siete canciones que no tienen desperdicio. Chequen “Superstar”, colaboración con Alemán.

Otros recomendables:

Santa Fé Clan, Tino El Pingüino, Eptos Uno, Bocafloja, Absa G. y Letra J.

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