En 1992, con la publicación de Lo peor de todo, irrumpió en la escena literaria española un joven escritor que, con pinta de rock star, prometía una gran revolución en las letras ibéricas. Con la influencia de escritores norteamericanos, y alejado de los temas y las formas con las que se venía escribiendo en ese país, Loriga no tardó en acaparar la atención de los lectores hispanos y en convertirse en el rostro de un nuevo grupo de narradores que se alejaban de las pretensiones de lo culto y en cuya obra había un gran número de referencias al cine, la música, la televisión y otras formas de cultura popular.

Para el inicio del nuevo milenio, Loriga se había apagado un poco: sus publicaciones se redujeron (de 2000 a 2014, publicó “solo”  cinco novelas) y su presencia en los medios era cada vez más escasa. Pero en 2017, con una historia titulada Rendición, obtuvo el Premio Alfaguara de Novela, un merecido reconocimiento por aquella obra y, también, por una enorme trayectoria. Y luego, en 2019, volvió a las librerías con otro gran título: Sábado, domingo.

También te puede interesar: El otoño de Sexto Piso: Valeria Luiselli y Carlos Velázquez

Todo esto viene a cuento por lo siguiente. Obsesionado con esta figura que marcó a varias generaciones de escritores, Daniel Jiménez presentó a inicios de año Las dos muertes de Ray Loriga, una novela que ya puede conseguirse en la Ciudad de México y que cuenta la historia de un hombre que intenta resolver el asesinato de Loriga, quien, durante una parada en Buenos Aires como parte de su gira de promoción de Rendición, fallece en condiciones muy sospechosas.

Quizás este sea un buen momento para mencionar que Jiménez es un joven autor madrileño (nació en la capital española en 1981), que en 2016 obtuvo el Premio Dos Passos a la primera novela por Cocaína, una dura historia autobiográfica en la que el escritor habla sobre adicción, literatura, duelo, fracaso, crisis y supervivencia, y donde ya parece estar la semilla de Las dos muertes de Ray Loriga.

También te puede interesar: ¿La mejor novela del año?

Lo más peculiar de esta segunda novela, creo, es la capacidad de Jiménez para mezclar géneros, ya que hay autobiografía, ensayo, reseña, novela negra y crónica. Se trata de un collage en el que lo mismo hay confesiones personales, fragmentos de la obra de Loriga, una crítica al mundo literario español y, en el fondo, un crimen que parece imposible de resolver. Pero también destaca la gran escritura de Daniel, que consigue hacer dudar al lector qué tanto de lo que está en el libro es verdad y qué tanto es ficción.

Para aquellos que ya conozcan la obra de Loriga, esta novela resultará sin dudas atractiva desde el inicio, y quienes no tengan todavía el gusto, pueden correr por este libro y por cualquiera de los de Ray; estoy seguro de que no se arrepentirán.

Si quieres leer un adelanto del libro, da click aquí.

Las dos muertes de Ray Loriga, Daniel Jiménez, Galaxia Gutenberg, Barcelona, 2019, 270 páginas