Este sábado 26 de julio se llevó a cabo la celebración por los 700 años de la fundación de Tenochtitlán en el Zócalo de CDMX. Más de 800 actores y actrices participaron en la megarepresentación “Siete siglos de legado de grandeza de México-Tenochtitlán 1325-2025”, espectáculo en el que se relató la historia de la antigua ciudad prehispánica.
Asimismo, en un acto encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum y la jefa de Gobierno de CDMX, Clara Brugada, se presentó un monumento conmemorativo que se quedará instalado en el Zócalo.
Así fue la representación de los 700 años de Tenochtitlán en el Zócalo
En el espectáculo “Siete siglos de legado de grandeza de México-Tenochtitlán 1325-2025” participaron 838 actores y actrices del Ejército Mexicano, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional.
Sobre la plancha del Zócalo se colocaron réplicas de pirámides prehispánicas que acompañaron a las esculturas monumentales de diosas mexicas que se colocaron semanas atrás para acompañar los shows de videomapping sobre Palacio Nacional y la catedral metropolitana.
La representación narró la historia de Tenochtitlán, partiendo de la peregrinación de los mexicas desde Aztlán hasta aspectos de la vida y la cultura en la urbe prehispánica.
La historia de los 700 años de Tenochtitlán se contó de la mano del personaje de Victoria, una niña que, al llegar de la escuela, cuenta a su familia lo que aprendió en clases.
Victoria empieza relatando la peregrinación de los mexicas desde Aztlán hacia la Cuenca del Valle de México, guiados por el dios Huitzilopochtili.
Posteriormente, se mostró el momento fundacional de Tenochtitlán: el momento en que las tribus peregrinas encuentran la imagen prometida del águila parada sobre una serpiente devorando un nopal.
El relato continúa continuó con otros episodios de la historia de Tenochtitlán, como la guerra contra los Tepanecas y la formación de la triple alianza con los pueblos de Texcoco y Tlacopan.
Finalmente, concluyó con Victoria entregando el bastón topilli a la presidenta Sheinbaum.
Develan monumento por los 700 años de Tenochtitlán en el Zócalo
Adicionalmente, en el Zócalo también se develó una escultura para conmemorar la efeméride.
Se trata de una réplica del Teocalli de la Guerra Seagrada, un monilito con forma de pirámide con imágenes talladas que representan en mito fundacional de Tenochtitlán. La pieza original, hallada cerca de Palacio Nacional durante excavaciones, data del año 1507. Se construyó durante el reinado de Moctezuma Xocoyotzin.
Adicionalmente, el monumento cuenta con una base circular sobre la cual se incluyen imágenes talladas del Códige Boturini, que relata la peregrinación de Aztlán a Tenochtitlán. La base también tiene imágenes representativas a tlatoanis mexicas y a mujeres destacadas de la historia prehispánica.
El legado de Tenochtitlán vive: Claudia Sheinbaum
Previo a la representación, la presidenta Claudia Sheinbaum destacó que el legado de los pueblos originarios continúa vivo en la cultura mexicana:
“Reconocer a Tenochtitlán no es hablar de un pasado muerto, sino del pulso vivo que late bajo nuestra ciudad capital, pero también en nuestras palabras, nuestra comida, nuestras costumbres y sobre todo, nuestra grandeza cultural y nuestra identidad”, dijo.
Añadió que Tenochtitlán “fue mucho más que una ciudad majestuosa; fue un símbolo de organización, de poder, de ciencias, de arte y de visión. Fue el centro de un mundo indígena que supo construir un modelo de civilización propio”.
La presidenta dijo que contrario a lo que se menciona en visiones eurocéntricas, no se trataba de pueblos salvajes, sino de “Imperio sólido con lengua, leyes, escritura, medicina, formas de cultura, ingeniería y conocimientos astronómicos”. No onbstante, recordó que en lugar de comprenderlo, los españoles decidieron aplastarlo:
“La caída de Tenochtitlán en 1521 no solo significó la destrucción de una ciudad, fue el inicio de un largo proceso de colonización que buscó borrar todo rasgo de lo indígena […]. La estructura colonial no desapareció con la independencia. Persistió en las formas de poder, en el racismo, en la exclusión de los pueblos originarios, en la marginación que aún hoy viven millones de mexicanos y mexicanas”, señaló.
Por ello, dijo que “erradicar el racismo no es una opción; es una necesidad y una obligación para construir una ciudad justa e incluyente para todos y todas”.
“El legado de Tenochtitlán no fue vencido, vive en la resistencia silenciosa de los pueblos, en la lengua náhuatl que aún se habla, en el maíz que seguimos sembrando, en el nombre de nuestros cerros, nuestros ríos, nuestras calles, en el nombre de nuestra patria, México”, finalizó.
Somos herederos de aquellos que fundaron esta gran ciudad: Brugada
Por su parte, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, calificó la conmemoración de los 700 años de la fundación de Tenochtitlán como “un día glorioso”.
“El egado mexica sigue vivo. Los saberes ancestrales, la cosmovisión que honra la tierra, el agua, el Sol y el viento nos siguen hablando. Viven los pueblos originarios en esta gran ciudad. La ciudad que emergió del agua se convirtió en la capital de una gran nación”. comentó.
Finalmente, dijo que “los mexicanos actuales somos herederos de aquellos que fundaron esta ciudad”.
