No somos adivinos pero “sencishito y carismático” fue lo primero que te vino a la mente cuando leíste el nombre de este lugar, ¿a poco no? Y sin ser adivino tú sabes que es de comida argentina.

Entonces ya te imaginaste frente a un buen jugo de carne, una papa al horno y un corte para darle gracias a la vida que te puedes empachar deliciosamente. Su menú ofrece cortes de carne, calzones, pizzas y espagueti. O sea, hay comida para muchos gustos sin que nadie se queje.

En el lado argentino tienen las clásicas empanadas, ensaladas, quesos fundidos, queso provoleta, embutidos, cortes importados, parrilladas, pollo a la parrilla y las televisiones para ver el fútbol, y ya se te antojó, ¿viste?

La carta de vinos para acompañar el lugar no es la más extensa, pero no les falta un buen acompañante para tu comida -o para tu pareja si decides ir en plan de dos. El ambiente da para invitar a la familia o los amigos, de igual manera el servicio es muy atento y no les va a fallar.

Los postres y café son buenos broches para cerrar la hora de la comida después de la cual puede que no cierren tus pantalones. No es cierto, no es para tanto, aunque a veces te gustaría que se expandieran solos después de comer, ¿no? Y no, no somos adivinos, nos pasa a todos.