Adonis se impone desde la calle: su forma de palacio moro recuerda un pabellón de cartón piedra de Disneylandia o un lujoso palacio de las mil y una noches. Adentro, la acumulación de detalles del Medio Oriente, sin armonía entre ellos, te hará pasar un momento divertido.

Tiene 25 años de existencia y se ha vuelto una referencia por su buena calidad de entremeses: el humus (garbanzo con ajonjolí) con su sabor fuerte y untuoso, el moutabal (berenjena) de sabor agrio y suave a la vez, interesantes al paladar. También recomendamos, el delicioso muhamasa, que combina  sus ingredientes a la perfección (la carne molida jugosa y los piñones perfuman mucho el garbanzo) y el fresco tabule. Todos esos entremeses están en el Plato Libanés, la mejor opción de la carta.

Ve con hambre, las porciones son generosas y te dejarán muy satisfecho en cuanto a la buena relación entre calidad y precio.

Si no conoces alguno de los platillos y no entiendes en qué consiste, los meseros te lo explicarán sin ningún problema. Prepárate para un servicio relámpago: no te habrás terminado tu primer platillo cuando ya te estarán llegando los siguientes.

Además, el restaurante tiene una tienda anexa, en donde puedes encontrar todo lo que propone la carta para llevar a tu casa a un costo más bajo. Si te gusta mucho lo azucarado, los dulces árabes son muy buenos.

Viernes y sábado tienen show de belly dance con cover. Entre semana tienen música de piano en vivo.