Este es uno de los “supergrupos” que tomamos más en serio, al menos en lo que va de su existencia. Es una banda que no deja de trabajar, que día con día sorprenden más y que a diferencia de muchos otros actos similares, no se oxidan. La fórmula de Jack White es sencilla: blues, blues y más blues… con un toque de inframundo. Lo dibujó en modo pop con The White Stripes, lo transportó al mundo del rock comercialoso con los Raconteurs, pero con The Dead Weather lo está llevando hasta niveles insospechados. Él, como hombre secundario en la batería, dirige a una banda liderada por una guapa y talentosa vocalista (Alisson Mosshart de The Kills), y como motor utiliza a Dean Fertita y Jack Laurence (Queens of the Stone Age y Raconteurs, respectivamente).
¿Han venido al DF?
Sí, fuimos víctimas de una hipnosis colectiva en el José Cuervo Salón.
¿Qué les hace falta para dar el brinco?
Llevan un buen ritmo (dos discos en dos años), pero su sonido todavía se queda en el nicho. Si para su tercer álbum lanzaran una rola con un coro muy pegajoso y un video que diera de qué hablar, seguramente tendrán (más) hordas de fans detrás de elllos.
Si pasan al olvido, ¿cómo los recordaremos?
Como el proyecto oscuro de Jack White, que como figura, ya ha pasado a los anales del rock.
