El detonador del Krautrock fue el festival de Essen de 1968 en el que las bandas alemanas tocaban de una manera totalmente diferente, al rebasar las fronteras conocidas de la psicodelia, para generar una pared de sonido minimalista con elementos electrónicos que jamás habían sido escuchados antes.
Este sonido llamó la atención de la prensa británica, quienes lo bautizaron como Krautrock, cuya traducción literal sería “rock col” (sí, como la ensalada de col agria con la que los alemanes acompañan todos y cada uno de sus platillos), debido a que en la Segunda Guerra Mundial los soldados ingleses se referían a los alemanes como “coles”. (Los ingleses siempre tan propios)
