Diego Ridolfi es el creador de la agrupación chilena Fármacos, uno de los grupos independientes más importantes de Chile gracias a su pop seductor con armonías de ambient y shoegaze. Fármacos acaba de estrenar su tercer disco Manual de una Pérdida, y tuvimos la oportunidad de hablar con Diego acerca de su futura mudanza a Ciudad de México, su deseo de componer nuevas canciones y los retos de componer su nuevo disco mientras estaba encerrado en su casa durante la pandemia. 

Chilango: Hace poco tiempo declaraste que se formó un vacío después de estrenar tu nuevo disco Manual de una Pérdida. ¿Cómo piensas llenar ese vacío?

Fármacos: Hay muchas que vienen. Mi partida a México. Mis ganas inmediatas de hacer música, cosa que no me había pasado tras hacer otros discos. Quiero iniciar al tiro un nuevo proceso musical. No puedo prometer nada y decir que habrá un nuevo disco el próximo año, pero al menos quiero estar componiendo. Hay algunos shows planeados.

Y para mí el todo ese desafío de una nueva vida en México, que recién estoy comenzando a configurar. Creo que hay varias formas de llenar ese vacío, y el esperar cómo avanza el disco es una de ellas. Cuando uno lanza un single, uno puede empezar a sacar ciertas conclusiones a la semana o al mes e ir evaluando. En cambio, un disco sea la cantidad de canciones que sean toma un tiempo. Con mi disco Estado de Gracia (2016), fueron años de ver que iba pasando.

“Escogí México porque es la audiencia más grande que tengo hasta el día de hoy”

C: ¿Por qué decidiste mudarte a México? ¿Cómo crees que cambia el proceso artístico viviendo en un nuevo lugar?

Farmacos: El ser inmigrante es algo que me tienta demasiado. Me interesa que la situación geográfica sea totalmente distinta a la chilena, también cambia la idiosincrasia, las personas con las que uno habla en la calle, el nuevo entorno. Me imagino que todavía no tengo que estar allá para reafirmar mi teoría, pero me imagino que es algo muy distinto y estimulante.

El salir de mi casa a tomar un café, es muy distinto a salir a tomar un café allá. Sea tomar un café, caminar, trabajar con otros músicos o ir a otros estudios. Vivir lejos de mi país y lejos de mi familia, lo veo como factores muy estimulantes a la hora de crear. Una de las cosas que más tengo ganas de hacer allá, obviamente a parte de llegar y tocar, es componer allá.

Escogí México porque es la audiencia más grande que tengo hasta el día de hoy. Tengo más fans que en Chile y eso que llevo haciendo música acá desde hace diez años. Cada vez que he ido a México ha sido una gran experiencia, cada vez va creciendo más. No me gusta decir mercado porque un mercado habla de capitalización, pero no pienso netamente en eso.

Pienso en como se puede expandir una carrera artística, en un lugar que es diez veces más grande que Chile. Y donde hay una apertura a la música alternativa mucho más grande de lo que hay acá. Viendo a bandas mexicanas que podrían ser colegas de estilo, que hacen conciertos en lugares grandes como en el Teatro Metropolitan, en Chile es medio impensado tocar en lugares tan grandes.   

“Me encanta el Parque México”

C: ¿Tienes algunos lugares favoritos de la Ciudad de México que hayas conocido en tus giras?

Fármacos: Hay un lugar que me gusta mucho por el microclima que se genera. Es un lugar muy pequeño en realidad, me encanta el Parque México. Es un microclima que cuadras más atrás no está porque hay caos en toda la ciudad. Entras al parque y entraste a otro mundo, se me hace muy sorprendente.

Es un pequeño lugar mágico, no es un lugar inmenso como el Bosque de Chapultepec. ¡Es una magia! Por ahí queda una taquería que se convirtió en una de mis favoritas que se llama Tacos Hola ‘El Güero’ donde pido opciones sin carne. Cada vez que he ido al lugar he encontrado comida deliciosa.

Las calles de por ahí me gustan mucho, me gusta como se cuida mucho la arquitectura en la ciudad. Cosa que acá en Chile no pasa, han destruido gran parte de las casas antiguas para construir edificios gigantes y horribles, en todos los barrios de Santiago. Me imagino que eso debe pasar en algunos lugares de Ciudad de México, pero al menos los barrios que he recorrido he visto que cuidan mucho la arquitectura.  

La música y el confinamiento

C: ¿Crees que la necesidad de componer música al tiro tiene que ver con la posibilidad de no hacer una gira normal? ¿Cómo cambiaron los planes en torno a la promoción del disco?

Fármacos: Creo que cuando estaba haciendo el disco, no hice tanta música. Por más que trabajas en el disco de una manera concentrada, ya no estás componiendo tanto, sino que te dedicas a grabar y componer el disco. Creo que por ahí hay algo que se acumula.

Por otro lado, el confinamiento te hace acostumbrar a estar tan encerrado tanto tiempo, uno se acostumbra a esa situación. Si estuviéramos en una etapa pre COVID se estaría tocando mucho más y eso se convierte en un distractor de la creación.

Por eso cuando hay que hacer un disco hay que parar un tiempo. Yo creo que el deseo de componer nueva música es una mezcla de todas las anteriores, pero también hay una parte de mi que aprendió a ser un músico profesional. El oficio de hacer música constantemente, creo que antes estaba en un proceso de aprendizaje, y ahora sé que es mi oficio de todos los días levantarme a hacer música.

Hacer música era una sensación muy extraña

C: Tienes tu estudio de grabación en casa. Además tu departamento se encuentra cerca de donde fue el estallido social de Chile en 2019.

¿Cómo afectaron los sucesos tu composición musical ? ¿Cómo estar encerrado en casa cambió tu manera de producir un disco? ¿Hiciste cosas en tu casa que antes no hacías? 

Fármacos: Yo creo que se hizo más extremo en mi personalidad no salir de mi casa, yo soy alguien muy hogareño. Si salgo de fiesta es una vez a la mil, mi momento de fiesta era cuando había shows y después de tocar pasarlo muy bien. Entonces salía, pero muy poco. Yo creo que fueron situaciones muy estresantes pensar que pre pandemia yo salía de mi casa y la policía estaba disparando.

Cerca de mi casa hay gente que perdió la vista, cerca de mi casa se incendiaron varios lugares y el barrio cambió por completo. Antes donde vivía era un barrio clásico por así decirlo y ahora se volvió en otra cosa el barrio tiene un espíritu muy extraño. Viniendo de cuando comenzó el estallido social, hacer música era una sensación muy extraña. Luego viendo la pandemia con su encierro obligado y creo que más que hacer cosas distintas, fue llevar el día a día a un extremo.

Por eso creo que Manual de una Pérdida termina con la intensidad que tiene, esa intensidad emocional es aumentada por todo esté encierro. No sé cómo se hubiera hecho el disco sin una pandemia, quizás hay canciones que no hubieran existido o canciones que no hubieran entrado al disco. La intensidad de estar tan adentro intensificó todo y agradezco esa intensidad por más que en muchos momentos la pase mal estando tan encerrado, pero es parte del mal artístico donde hay que sufrir una hora para parir una canción. 

Los procesos de producción

C: Tu proceso de producción tiene un gran sentido de refinamiento gracias a años de colaboración con tu amigo Cristián Heftye. ¿Cómo ha beneficiado su relación a tu trabajo de producción? ¿Te gustaría empezar a trabajar como productor?

Fármacos: El trabajo con Cristían fue algo totalmente fundamental, sin él el disco sería totalmente otro. No sé ni cuando habría terminado sin su presencia. Somos amigos aparte. No solo es un productor, sino que también tiene una función de guía.

El no tomaba todas las cosas, sino que muchas cosas me las encargaba a mí porque decía que yo tenía claro por donde va la canción y tenía que ejecutarlo. La producción fue muy 50 / 50. Muchas fueron hechas por él, otras totalmente por mí y otras trabajamos en conjunto. Respetabamos el espíritu de cada canción, más que buscar quien tiene la batuta en la producción, buscábamos que oído o que cerebro le quedaba mejor a la canción.

Y respecto a la producción con otras bandas es una faceta que siempre me ha dado mucha curiosidad. Lo he hecho hace tiempo con proyectos más pequeños que no siguieron tocando, pero he tenido aproximaciones a la producción y mezcla. Es algo que tengo pendiente, aunque no sé si es algo que le dedicaría una parte importante de mi vida porque he aprendido también que yo soy productor de mí música más que ser un productor en general. Yo intento producir mi música, pero me gustaría ponerme el desafio de ver una obra desde un lugar externo y opinar desde ahí.

Es un lugar más objetivo, el mismo Cristián me ha comentado que es mucho más difícil estar desde adentro que desde afuera en una canción. Me daría curiosidad desarrollar la producción en México. Si se me presenta algo, sería muy feliz de hacerlo. 

Mi canción favorita

C: Para finalizar la entrevista. ¿Sigues pensando que “Un día para siempre” es tu canción favorita de Fármacos?

Fármacos: Por ahora si lo sigue siendo, quizás pueda cambiar cuando vuelva a escuchar el disco que es algo que no quiero hacer en mucho tiempo. La canción tiene algo muy íntimo, no es algo que pueda expresar y ser concreto en decirte el ¿por qué? Es algo muy íntimo lo que me sucede con la canción y al escucharla las vibras que toca su música. 

#SonoraIberoamérica Vol.5: El futuro de nuestra música