Prepárate que en agosto se vienen una buena selección de estrenos musicales para cerrar el verano como se debe. Saca tus audífonos, vete a dar una vuelta y disfruta las propuestas que estos artistas traen para ti.

Sabrina Carpenter — Man’s Best Friend
Agosto 29
Tras el hitazo “Espresso”, Sabrina vuelve con rolitas más afiladas. Después de ver la controversial portada, parece que el disco también muerde: letras punzantes, producción de Jack Antonoff y beats disco/pop con sabor a amor de verano. “Manchild” ya fue número uno y el álbum pinta para soundtrack de amores tóxicos, pero bailables. Entre sátira feminista y burla romántica, Carpenter se afianza como la estrella de pop más sneaky de su generación con canciones que hacen alusiones a su vida y a sus relaciones amorosas reales sin guardarse la sopa.

mgk — lost americana
Agosto 8
Machine Gun Kelly se puso nostálgico con ese sabor a resentimiento que ya sabe hacer tan bien. Su nuevo disco es una crítica al “sueño americano” con una producción musical envuelta en riffs noventeros y spoken word, claro, al estilo americana. El sencillo “cliché” ya circula, con un trailer en el que mgk habla como Bob Dylan en ácido. Aún no revela el tracklist, pero sus fans ya elevaron el día a feriado no oficial: el mgk day. Si vienes por el drama, este artista nunca nos dejará nada que desear. Y si lo tuyo es el rock-decepcionado-con-el-sistema, prepárate porque ya tienes nuevo material.

Ethel Cain — Willoughby Tucker, I’ll Always Love You
Agosto 8
Una historia sureña, queer y rota: Ethel regresa con una precuela trágica de su disco anterior titulado Preacher’s Daughter (2022). Esta vez viaja a 1986 para contarnos el romance maldito con Willoughby Tucker. Oscura, épica y larga, esta obra nos adentra a la mente de la cantautora como solo ella lo sabe hacer, con temáticas y ambientaciones densas, letras confesionales y un mood de carretera sin regreso. “Nettles” y “Fuck Me Eyes” han sido los sencillos que funcionan como gancho del disco; el resto, pura entraña. Además, parte de lo que se recaude en su gira irá a apoyar colectivos trans.

Reneé Rapp — BITE ME
Agosto 1
Reneé no vino a hacer amigos: vino a soltar madrazos emocionales. En BITE ME cambia el mood vulnerable de su debut por un pop más crudo, enojado y lleno de sarcasmo. “Leave Me Alone” y “Mad” (con Alexandra Shipp) son himnos anti-vato-idiota. Producido por Alexander 23 y Omer Fedi —que han colaborado con Justin Bieber, Role Model, Olivia Rodrigo y Tate McRae, entre otros—, el disco suena a un crashout seguido de una epifanía. Ideal para llorar, mentar madres y luego salir guapísima a bichotear. Rapp se confirma como la voz de las soft gritonas que siguen estando más del lado pop que del rock.

The Black Keys — No Rain, No Flowers
Agosto 8
Después de un año complicado, los Black Keys regresan con un álbum más emotivo que cervecero. Grabado en Nashville y producido junto a Rick Nowels y Scott Storch —famosos por trabajar con Lana del Rey, Dr. Dre y Nas—, este disco mezcla groove, melancolía y ganas de seguir bailando a pesar de todo. “The Night Before” y “Babygirl” calientan motores para un disco que huele a vinilo, neón y sudor de toquín. Perfecto para estos días de verano lluviosos llenos de melancolía, porque hay que recordar que sin lluvia, no hay flores.

Laufey — A Matter of Time
Agosto 22
El tercer disco de Laufey suena a un jazz pensado para la generación del ghosting. Más grande, más orquestal y más personal, este álbum con producción de Aaron Dessner —miembro fundador de The National—, explora amistades rotas, relaciones a medio camino y el miedo de enamorarse en voz baja. “Tough Luck” y “Silver Lining” son joyas delicadas que raspan bonito y nos dan una pequeña muestra del potencial de este álbum. Laufey está lista para llenar teatros, corazones y playlists tristes. Y tú, ¿ya lloraste hoy?