Las noches sin dormir a causa de una tos que no cesa, el cuerpo cortado, los mocos que escurren y el dolor de pecho son síntomas que nadie disfruta. Ante nuestra consternación, aquí les ofrecemos algunas recomendaciones que evitarán que contraigan aquel tan insoportable y contagioso virus gripal y que anden de virulentos por toda la ciudad.
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Té de abango con miel
Es uno de los más básicos y se debe tomar apenas empieza la tos. Sólo tienes que comprar una caja de bolsas de té de abango y endulzarlo con miel. Mientras más lo tomes, el efecto será más efectivo. No es el sabor más agradable pero tampoco es intolerable y no hay riesgo de exceso de consumo.
Aire de eucalipto
Lo único que debes hacer es poner varias hojas de eucalipto en un recipiente de boca angosta lleno de agua hirviendo, el objetivo es hacer repetidas inhalaciones para dejar que la hierba descongestione por competo.
Ajo (sí, lo sentimos)
Puede sonar un tanto brutal, pero el ajo es un excelente antídoto contra la gripa. Se sugiere exprimir su jugo y tomarse dos cucharadas al día, pero aquí entendemos que eso es un poco drástico por lo que sugerimos hacer el siguiente té: toma té de canela y mézclalo con hojas de bugambilia, jugo de limón y ajo y endúlzalo con miel. La mezcla de hierbas ayudará a combatir la gripa y disfrazará el sabor del ajo.
Té de bombón
Prepara un té de gordolobo (esta hierba no es fácil de encontrar en el súper por lo que se sugiere hacerlo en el mercado), endúlzalo con bombones y espera a que se derritan; estos, por más extraño que parezca, ayudarán a combatir las flemas y a exterminar la tos.
La marranada
Este remedio es para los muy valientes que estén dispuestos a toser varios minutos sin parar. Tienes que añadir a un caballito de tequila una cucharada de miel y jugo de limón, calentar en el microondas durante 30 segundos y tomarlo de un jalón (como si fuera shot). Al principio te hará toser mucho, pero después la tos se irá por completo.