El 19 de septiembre de 1985, la Ciudad de México despertó con una tragedia que la transformaría para siempre. A las 7:19 horas, un terremoto de magnitud 8.1 sacudió la capital, derrumbando cientos de edificios y dejando miles de muertos. La devastación fue tan profunda que no solo cambió la fisonomía urbana, también dio origen a un movimiento social de solidaridad ciudadana sin precedentes.
Algunos de los puntos más golpeados hoy se mantienen vivos en la memoria colectiva, transformados en espacios con nuevas funciones pero cargados de historia.
Lugares más afectados por el Terremoto de 1985
Hospital General de México
Uno de los símbolos más dolorosos del sismo. Varias áreas colapsaron, entre ellas la ginecoobstetricia. Decenas de bebés murieron, pero también hubo rescates milagrosos: los famosos “bebés milagro” que sobrevivieron varios días bajo los escombros. Médicos, enfermeras y familiares excavaron con sus propias manos para sacar sobrevivientes. Justo esta historia es la que narra la serie Cada minuto cuenta 2, dirigida por Jorge Michel Grau.
Hoy el hospital sigue en funciones, obviamente reconstruyeron varias áreas del mismo, y su historia quedó ligada para siempre a la resiliencia médica.
Hotel Regis
Ícono del lujo capitalino en Avenida Juárez, donde se hospedaban artistas y políticos. El 19S lo derrumbó en segundos; el reloj del lobby quedó marcado en la hora del sismo. Tras el colapso, incendios agravaron la tragedia. Murieron decenas de huéspedes y trabajadores.
Hoy en su lugar está la Plaza de la Solidaridad, un espacio público con un monumento que honra la unión de los mexicanos en la catástrofe colocado en 1991 y dedicado al espíritu de solidaridad de los habitantes y rescatistas de la Ciudad de México.
Unidad Habitacional Tlatelolco
Uno de los complejos residenciales más grandes de Latinoamérica, diseñado por Mario Pani, sufrió pérdidas devastadoras. El edificio Nuevo León se desplomó con cientos de familias dentro. Muchos quedaron atrapados; el rescate fue caótico y heroico a la vez.
Hoy justo donde se derrumbó el edificio Nuevo León sólo hay jardines y una placa de Plácido Domingo. ¿Por qué? Porque el artista perdió familiares en el terremoto de 1985 y porque participó como rescatista y apoyó a las víctimas tras el sismo.
Parque Delta (antiguo Parque del Seguro Social)
El estadio de los Diablos Rojos se convirtió en morgue improvisada. Ahí llegaron cientos de cuerpos porque las instalaciones forenses colapsaron. El estadio, símbolo del deporte, se transformó por días en un lugar de duelo masivo.
Hoy es el centro comercial Parque Delta, concurrido por miles cada día, aunque pocos recuerdan su oscuro papel en 1985.
El terremoto de 1985 dejó más de 10 mil muertos, según cálculos no oficiales, y miles de heridos y damnificados. Fue también el inicio de una sociedad más consciente, capaz de organizarse frente a la inacción gubernamental.
Cuatro décadas después, la memoria de esos días sigue viva en los espacios que hoy ocupamos. La CDMX no es la misma desde entonces: aprendió, resistió y nunca volvió a mirar el suelo con la misma confianza.