Si nunca te imaginaste vivir de los videojuegos, entonces nunca tuviste infancia. No te preocupes, actualmente esto ya es posible en muchas partes del mundo. Y aunque en México la industria de los deportes electrónicos va creciendo a buen ritmo, es importante saber que ganar dinero por jugar no es tan sencillo como parece, pues obtener un patrocinio o formar parte de un equipo profesional requiere de firmar un contrato de gamer.

En el mundo de los videojuegos, conocidos —profesionalmente— como deportes electrónicos (e-sports), las empresas interesadas en invertir su capital se pelean por patrocinar a los mejores talentos, pues saben que su imagen les traerá buenas ganancias debido a que son figuras muy reconocidas entre el público joven y, por lo tanto, influyentes.

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Y en esta guerra de patrocinios, los jugadores se ven obligados a firmar un contrato de gamer, en el que, además de formalizarse las ganancias (en dinero o en especie), se establecen diversas limitaciones, como por ejemplo: exclusividad, para evitar que les ofrezcan mejores condiciones y se vayan con otro equipo u otro patrocinador.

Por esta y muchas otras razones, Chilango entrevistó al abogado especialista en Derecho Deportivo y fundador de la consultora especializada GameMetron, David Santiváñez, para que nos cuente cómo se firma un contrato de gamer. A la vez que, dos jugadores profesionales nos cuentan su experiencia viviendo el sueño: recibir dinero solo por jugar.

‘Si ya tienes sueldo, ya es tu chamba’

“Al principio, los padres no lo ven de una muy buena forma, pero ya cuando empiezas a generar, por ejemplo, que empiezas a ganar torneos y dinero, ya lo ven como otra manera de ingreso para la familia”, externa Bryan Lira Medina, también conocido en el ranking mundial de Super Smash Bros Ultimate como BryanZ.

Lo mismo le sucedió a Abraham Slane Parra, a quien su familia le dijo: “Si ya tienes sueldo, ya es tu chamba”. El también conocido como BigBoss empezó a jugar desde los 5 años, a diferencia de Bryan, quien lleva la mitad de su vida jugando: 10 años.

Tanto Abraham, de 19 años de edad, como Bryan, de 20, han sabido demostrar un gran nivel de juego, incluso a nivel internacional.

FOTOS: ANEL RANGEL

Por eso, su talento atrajo el interés de un patrocinador muy peculiar que conoce a profundidad el mundo deportivo tradicional: la organización de lucha libre mexicana, Triple A, la cual contactó a sus representantes de la empresa MK y les ofreció patrocinarlos:

“Los de MK son nuestros mánagers, son los que ven todo por nosotros. Son quienes asesoran a MKLeo, el mejor jugador de Super Smash Bros Ultimate en el mundo. Con su experiencia, se encargaron de asesorarnos para firmar con Triple A”, comenta Bryan.

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“La gente de AAA es muy amable, están dispuestos a escuchar y aprender del juego, hicieron sus respectivas investigaciones y al final decidieron probar con nuestros jugadores”, agrega personal de MK, la marca mexicana y equipo profesional que fue primer patrocinio de estos jóvenes talentos.

Actualmente, los dos tienen un contrato de gamer con la Triple A, tanto de equipo como de imagen, por un periodo de prueba, en el que ganan 10 mil pesos mensuales y portan un jersey con la marca en el pecho y su nombre en la espalda.

Entre las condiciones del contrato se encuentra una muy peculiar: tienen que jugar enmascarados. Como si se tratara de los mismísimos “técnicos”, apuestan la máscara a cambio de la cabellera de los contrarios, como sucedió el pasado miércoles 27 de noviembre de 2019.

Foto: Tomada de Facebook mk.nime

“Al tener un patrocinador tan reconocido y con tanta tradición ya se ve de otra forma. No es lo mismo venir a competir a los torneos casuales, que venir a competir teniendo ya este nombre”, confiesa Bryan, y agrega que el apoyo de su patrocinador los ha motivado para superarse a sí mismos, para aspirar a competir entre los mejores del mundo, como frecuentemente lo hace el también mexicano MKLeo.

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No obstante, una vez firmado su contrato de gamer, deben ganar torneos y seguir demostrándole a la Triple A por qué son los mejores. “Darle dinero a alguien sin saber si se te va a retribuir es como, de cierta forma, un volado. ¿Sí me va a funcionar o no?”, explica Abraham, respecto al compromiso de los patrocinadores que otorgan un sueldo fijo solo por jugar.

Tanto Abraham como Bryan consideran que en México todavía no es posible vivir solamente de jugar, a pesar de obtener un sueldo por hacerlo. “Si nosotros quisiéramos dedicarnos solamente a esto, sería irnos a vivir a otro país y competir ahí”, explica Bryan.

Ambos están ahorrando para viajar a otros países con el objetivo de impulsar su carrera: “Hay muchas partes de Estados Unidos donde no traen nada de nivel, donde te puedes rifar y ganar, y como la meta es en dólares, sacar lo más que se pueda y regresar, es como el sueño americano pero en forma de e-sports”, adelanta Abraham.

FOTOS: ANEL RANGEL

¿Cómo firmo un contrato de gamer?

“Los jugadores tienen que fijarse, en primer lugar, cuál es la temporalidad del contrato y su salario, cuánto tiempo van a ser parte del equipo, cómo van a ser tratados, cómo es el tema de la compra-venta, y demás. Esto dentro del documento”, recomienda David Santiváñez.

Ningún contrato de gamer es igual, cada patrocinador o equipo ofrece condiciones distintas, por lo tanto, no hay cláusulas específicas, todo requiere de una revisión exhaustiva para saber qué le conviene más al jugador, aclara la consultora jurídica para la industria creativa y e-sports, GameMetron.

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Antes de firmar, debes distinguir entre estos dos tipos de contratos: el que se realiza con un equipo profesional de e-sports, y el que ofrece algún patrocinio para usar la imagen de los jugadores, explica David Santivánez, quien fundó GameMetron desde la cocina de su casa, el 24 de mayo de 2018. Ninguno de estos dos tipos de contrato de gamer se relacionan con algún tipo de contrato laboral, de acuerdo con David: “Tienen que ver más con marketing”.

“Nosotros primero vemos quiénes son los que están detrás tuyo, qué empresa, quiénes quieren ser tu patrocinio y quién te conviene más. A nosotros nos gustaría que quienes se acercan con nosotros tuvieran todos los patrocinios, pero es que hay diferentes tipos. Hay unos que ofrecen seis meses y otros dos años. Hay que ver factores de imagen, monetarios, y otros temas más. Una vez que analizamos todas las perspectivas ya podemos decirle cuál les conviene más”.

Tipos de contrato

De equipo. Además de lo que te vayan a pagar por jugar, debes fijarte que te ofrezcan seguridad o asistencia médica:

Un contrato de gamer puede ofrecer desde 5 mil hasta 40 mil pesos al mes, según datos de GameMetron, empresa especializada en e-sports que ha asesorado a —por lo menos— 150 jóvenes en México desde que abrió sus puertas. Actualmente ofrece más de 60 servicios legales.

El sueldo evidentemente varía según los torneos que hayas ganado, y lo reconocido que seas entre la comunidad gamer, ya sea en rankings como en redes sociales. Lo ideal es que no firmes un contrato de gamer si te ofrecen menos de 5 mil pesos mensuales o lo equivalente en hardware.

“Hay equipos que se preocupan por el desarrollo físico y humano de sus deportistas. Tienen nutricionistas y personas encargadas del tema físico-motor, de las lesiones. Hay unos equipos que salen a entrenar como si fueran equipos de futbol, a correr todos los días, hacen ejercicio en el gimnasio. Finalmente se convierten en deportistas de élite, de alto rendimiento”, explica.

El dinero de un patrocinador puede ayudar para conseguir una gaming house, es decir, una casa exclusiva para jugar y/o entrenar deportes electrónicos, donde además puedan dormir y comer, sin necesidad de regresar a sus casas durante un torneo.

Por eso, si el contrato de gamer te ofrece una gaming house, considera que ya no será necesario ahorrar o invertir en hardware, por lo tanto, no podrías rechazar esa opción, aunado a los dos requisitos anteriores.

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Contrato de patrocinio. Los patrocinios son todas aquellas marcas que realizan una “inversión” en alguna figura pública, ahora conocidos como “influencers”, para promocionar sus productos. “Es una estrategia de marketing”, menciona David.

Los patrocinios otorgan sus productos a los jugadores para que los utilicen y promocionen en partidas, videos, transmisiones en vivo o comerciales. Esto con la finalidad de atraer público joven, en el caso de los deportes electrónicos.

Algunos simplemente ofrecen dinero a cambio de utilizar la imagen de los jugadores. Esto debe aclararse en el contrato de gamer, por cuánto tiempo se utilizará su imagen, en qué soportes (internet, televisión, radio, espectaculares, etc.), y cuánto pagarán por esto.

Tanto en el contrato de gamer por equipo, como por patrocinio, es importante mencionar que si eres menor de edad, debes solicitar la ayuda de tus padres o un apoderado legal, aconseja David:

“Como cualquier menor de edad, nunca deben firmar ellos. Hacer que un menor de edad firme este contrato de gamer, hace que este documento sea nulo. Por ende, quienes tienen la responsabilidad de firmarlo, son sus padres, madres, o apoderados legales. Ni siquiera un mánager, a menos que tenga la autorización del padre. Una vez que cumpla los 18 años, él puede firmar lo que considere conveniente”.

Si el contrato de gamer que te ofrecen no es claro con estas cláusulas, es mejor que solicites ayuda jurídica especializada en Derecho Deportivo, y —por más que te gane la emoción— resérvate el derecho a firmar si no estás totalmente convencido de lo que te ofrece el equipo o el patrocinador.

¿Cómo conseguir patrocinador o equipo?

A un patrocinador le interesa que ganes torneos, que ya tengas exclusividad con un equipo, experiencia en torneos, vistas o reproducciones de stream en Twitch o Youtube, y que tengas muchos seguidores en tus redes sociales.

“Si tienes millones de visitas, eres atractivo hasta para Carlos Slim. Porque sabe que contigo recupera la inversión. Concéntrate en ser atractivo y te van a patrocinar”, recomienda David.

A pesar de la guerra de patrocinios, GameMetron nunca ha detectado alguna marca que le quiera ver la cara a un gamer, esto porque —argumenta David— saben que los jóvenes son los futuros compradores de sus productos: automóviles, tecnología, comida, ropa, etc.

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GameMetron, junto con Amapola y Esportsmania, son empresas mexicanas creadas especialmente para apoyar a los gamers en este proceso de firmar un contrato de gamer, incluso son ellas mismas quienes ofrecen el patrocinio para impulsar a nuevos talentos.

“Nos creamos para los independientes, para esos que requieren ayuda (legal) y muchas veces no pueden acceder a ella (…) La guerra de patrocinios no es mala, es positiva. Pasa en el futbol y eso está muy bien. Y va a acentuar ese compromiso con los e-sports. Ahorita la burbuja ya reventó, y tenemos en este momento talento de primer nivel”, concluye David.