La artista plástica Eva Vale prepara su próxima exposición, “Eye Candy”, cuya particularidad es que se enfoca sólo en figuras masculinas. Nos contó por qué.
Lo tuyo es plasmar el universo femenino, ¿por qué entrarle ahora al masculino?
Eva Vale: Porque descubrí que están en una guerra de identidad, en una batalla importante de rol. Están dando un nuevo brinco y necesitamos que existan imágenes que generen esta referencia. Además, quería hurgar del otro lado en aspectos como la fragilidad.
¿Cómo seleccionaste a tus hombres?
EV: Hay de chile, pozole y mole. Son 10 casos de éxito, y cuando hablo de éxito me refiero a un sistema de equilibrio entre su parte sentimental y su parte pragmática. Uno de ellos es Rodrigo Trujillo, productor de una empresa llamada Balero; Nicolás Vale, quien además de ser mi hermano, es quien lleva Millesime; Manuel Rivera, CEO de Expansión, Uriel, el dueño de Erotika Sex Shop, y José Antonio Zúñiga, el “presunto culpable” –que es puro corazón–, entre otros.
¿En qué aspectos de ellos te basaste para la creación de la obra?
EV: Los Stalkée en su Twitter y tomé los tuits que me parecieron increíbles; pero con aquellos que no tienen esta red social, o que más bien las usan como parte corporativa de su trabajo, me senté a platicar y les pedí que me contaran su vida, nos tomábamos una botella de vino y, mientras, escribía las frases que me parecían maravillosas.
Nos llamó la atención los materiales que usaste…
EV: Sí, usé tapas de cajas de luz, las que cubren los cables; me parece muy poético por lo que pueden representar: un instrumento masculino que además es solamente una careta. Porque de los hombres casi siempre vemos una parte superficial, pero lo interesante es lo que está atrás. También usé tinta china, soldadura, tuercas, tornillos, pero todo sobre una gama de colores pastel.
Eye Candy
Aristóteles 123,
Polanco, es en un estacionamiento.