Al igual que los restaurantes y otros sectores como el cine y el teatro, los bares, antros, cantinas y discotecas de CDMX piden un plan de reapertura, pues llevan 10 meses sin poder abrir como lo hacían normalmente debido a la pandemia por covid-19. Hoy, a casi un año de haber cerrado, los bares protestan y exigen reabrir, además de más apoyos.

Recientemente, ante la presión de la industria restaurantera, el gobierno de CDMX implementó el programa #ReabrirSinArriesgar, el cual permite a los restaurantes abrir en terrazas y con varias medidas que deben seguir, pues está demostrado que los contagios se dan fácilmente en espacios cerrados.

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Los bares y las cantinas tuvieron que cerrar sus puertas debido al aumento de casos por covid desde hace más de 10 meses. Poco después, pudieron dar servicio gracias al programa Reabre, que permitía a estos negocios dar un giro y vender comida. Sin embargo, a mediados de noviembre el gobierno decidió suspenderlo, pues de acuerdo con la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, hubo “incumplimiento de las medidas sanitarias”.

Ahora, los bares protestan y exigen reabrir. En una protesta pública en la explanada del Monumento a la Revolución, este sector pide, por medio de la Asociación Mexicana de Bares, Discotecas y Centros Nocturnos, que haya un plan para que puedan reabrir, siguiendo medidas sanitarias. Según Helking Aguilar Cárdenar, presidente de la Ambadic, “si esperamos al verde nos morimos” dijo en entrevista con Gabriela Warkentin.

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Según dice, no han tenido ningún tipo de apoyo y que buscan que, poco a poco, puedan ir reabriendo sus espacios. Aseguró que no buscan abrir en semáforo rojo, pero que sí podrían hacerlo en semáforo naranja, siguiendo estrictos protocolos de sanidad y restricciones. “Cumpliendo con esos protocolos podemos salvar muchos empleos y salvar muchos negocios de la quiebra”, dijo en entrevista con Forbes México.

Bares protestan y exigen reabrir
Foto: Rafael Rivera/ Chilango

La Ambadic empezó negociaciones con el gobierno de CDMX. “No se trata de negocio, sino de salvar esos empleos sobrevivir”, afirmó su presidente. Las conversaciones con el gobierno son sobre cómo podrían hacerlo y proponer protocolos que podrían seguir.

Entre las medidas que proponen están salidas escalonadas de los lugares, aforos y horarios reducidos, seguir las medidas básicas, no usar pistas ni barras (todo sería en mesas), además de entrada con reservación.

Foto: Rafael Rivera/ Chilango

Similar al #AbriroMorir de los restaurantes, los bares y las cantinas comenzaron una campaña llamada #VasosVacíos. Como parte de ella, llamaron a una protesta pacífica este 28 de enero en el Monumento a la Revolución. “La situación es ya muy crítica, es un grito desesperado”, afirmó Helking Aguilar.

Movimiento Vasos Vacíos

Vasos Vacíos nace ante la imperiosa necesidad de una fuerza laboral de ser escuchada y que desde el pasado mes de Octubre ejerció más presión sobre la Asociación para que tomaran cartas en el asunto.

Fueron numerosos sindicatos los que sentían ya la urgencia de salir y marchar en las calles; desde músicos y DJs hasta meseros, con el riesgo de crear una situación en la que se comprometiera la salud de los asistentes y que las autoridades se negaran a entablar una conversación para buscar soluciones.

Así fue como la AMBADIC establece diálogo con el Gobierno de la CDMX, pero lamentablemente comentan, fue prácticamente nulo con la única respuesta de que no había plan de reapertura ni más sobre qué discutir.

Eso es lo que dio pie a toda esta campaña que se hizo visible con un meeting en el Monumento a la Revolución, para presionar una respuesta y que además la gente se diera cuenta de lo olvidado que estaba el sector.

“No se trataba de abrir mañana, no se trataba de abrir pasado mañana, o incluso de poner una fecha como en su caso hicieron los restaurantes con ‘Abrimos o morimos’ porque entendemos la complejidad de la pandemia; pero sí se trataba de tener un plan de reapertura gradual y la oportunidad de ir reabriendo paulatinamente, aun sabiendo que sería con muchas limitaciones y evidentemente con protocolos que la industria presentó desde Septiembre” nos cuenta Helking.

Sigue activo este movimiento y va creciendo cada vez más con la unión de otros sectores como el de eventos, jardines de fiestas, entre otros.

Por otro lado, están creando en campañas mediáticas donde éste y otros sectores podrán darse a escuchar en caso de ser dejados de lado con sus exigencias laborales.

Poco después del meeting de Vasos Vacíos, la situación ha ido hacia adelante con pequeños pasos.

¿Qué necesita la industria para mejorar su panorama? “Por un lado necesitamos unión general, que la tenemos afortunadamente. Conforme avanza la situación, la unión se fortalece […] y necesitamos que la autoridad sea receptiva, empática y que entienda que no se trata de abrir por abrir, que no queremos abrir por abrir; que no es una necedad, es una necesidad. Que necesitamos salvar a esta industria. Que necesitamos salvar las fuentes de empleo, y que establezcamos protocolos de lugares seguros.”

Y es que no es sólo la pérdida de empleos, sino que la cesación de actividades de estos centros ha fomentado un sinfín de fiestas y eventos particulares clandestinos.