Si te quedaste sin chamba o te mandaron a descansar sin goce de sueldo, aquí te compartimos las recomendaciones de especialistas para negociar el pago de la renta con tu casero.

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La contingencia por el COVID-19 no solo está afectando la vida cotidiana de la ciudad, también las finanzas de muchos chilangos, ya sea porque tuvieron que cerrar sus negocios o porque sus empresas los enviaron a casa sin goce de sueldo.

En solidaridad con los afectados por las medidas para evitar la propagación del virus, la jefa de gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum, pidió a los caseros chilangos dar prórrogas en pago de renta en CDMX.

Por ello, no está de más saber cómo negociar el pago de la renta de tu casa o departamento mientras pasa la emergencia sanitaria.

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Lo ideal sería que todos tuviéramos una estrategia financiera para enfrentar este tipo de situaciones, explica Marco Torres, gerente de operaciones de la plataforma Homie.mx.

“Si bien, siempre se recomienda dentro de las finanzas personales, tener un colchón de emergencia, equivalente a tres veces el salario que estás percibiendo en ese momento”, señala.

Tips para negociar el pago de la renta

Pero como seguramente, igual que muchos chilangos, no cuentas con este fondo de emergencia, el siguiente paso es hacer un plan de gastos y así reducir los que no son necesarios en este momento.

Una vez que tengas bien claro con cuánto dinero cuentas, es momento de que pienses en las opciones que tienes para negociar la renta con tu casero.

En este caso, señala Marco Torres, pueden existir dos opciones: la primera es hacer una reducción del monto de la renta por un tiempo determinado. “Esto beneficia a ambas partes: al inquilino porque posiblemente esté enfrentando una situación económica complicada si su empresa tomó la decisión de darle un permiso temporal sin goce de sueldo, reducirle el salario o que esté desempleado; del lado del propietario, la ventaja es que no va tener su inmueble desocupado durante dos o tres meses sin percibir una renta, ya que después, al reactivarse la economía, posiblemente pasarán dos o tres meses más para volverlo a rentar, entonces podría tener un periodo de hasta seis meses sin percibir ingresos por su inmueble”, explica el experto en temas financieros.

La segunda opción es la condonación total de la renta y que al momento de reactivarse la economía, estos meses que no fueron pagados se empiecen a cubrir de forma diferida en pagos pequeños, es decir, si pagas una renta de $15,000 mensuales, esta podrá ajustarse a los $18,000 en los meses posteriores y así cubrir la deuda.

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También hay otras estrategias que se pueden aplicar para negociar el pago de la renta de una forma que sea más atractiva para los caseros, como la posibilidad de ofrecer algo en intercambio, propone Leonardo González, analista del portal Propiedades.com.

“Si un propietario concede un trimestre a sus inquilinos y no percibe el alquiler, los inquilinos deberían ofrecer algo en intercambio como puede ser pagar una remodelación, o pagar los intereses de la renta no percibida, o bien un ajuste en el monto de la renta cuando se realice la renovación del contrato”.

González también sugiere aprovechar el uso de esquemas novedosos como Airbnb, pues se podría utilizar una parte del inmueble para rentarlo por este medio y así compensar los alquileres no pagados.

En cuanto a las formas en que ambas partes deben respaldarse legalmente y que se debe considerar dentro de los pasos para negociar el pago de la renta es el hacerlo mediante un contrato de por medio.

Esto asegura que tanto el inquilino como el arrendatario cumplan con las condiciones acordadas, para eso, señala Marco Torres, siempre debe hacerse por escrito.

Este documento o formato debe estipular claramente las condiciones del acuerdo, tener los nombres y firmas de ambas partes, así como adjuntar las identificaciones del propietario y el inquilino.

En tanto, Leonardo González sugiere que en este caso lo que se tendría que hacer es rescindir el viejo contrato y firmar uno nuevo en el que se puntualicen las nuevas condiciones de renta.

No obstante, explica el experto en el sector inmobiliario, “cuando un contrato de alquiler lo pones a prueba en una situación de vulnerabilidad como esta (la contingencia por el COVID-19), es un contrato muy débil, puede llegar a ser insignificante”.

También existe la posibilidad de que tu casero no acepte ninguna de las negociaciones anteriores y que, en el peor de los casos, pida cancelar el contrato. Si es así, la opción es pedir que no se apliquen las penalizaciones que vienen estipuladas en el contrato, a fin de terminar la relación casero-inquilino en los mejores términos posibles.

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¿Qué hago si tengo una hipoteca y no la puedo pagar?

A diferencia de las rentas, en todo contrato de hipotecas sí existen desde seguros, en caso de impagos, hasta posibilidades para refinanciar la deuda.

“Para los esquemas hipotecarios es más directo porque está más institucionalizando, existen esquemas de aplazamiento, como la posibilidad de acceder a cuatro meses de holgura en el pago”, explica Leonardo González.

Por ello, lo primero que debes hacer es acudir directamente con el banco o institución financiera con la que solicitaste el crédito a fin de encontrar la mejor solución a tu problema financiero.

En las últimas semanas, diversos bancos e instituciones como el Infonavit han publicado las ayudas que darán a sus clientes para hacer frente a la contingencia. En algunos casos se ofrecen la suspensión de los pagos; sin embargo, es importante revisar los términos y condiciones de estas prórrogas ya que algunos implican el pago de intereses.

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