Sabemos que la biopic de un escritor puede no sonar tan llamativa como la de una estrella de rock. Pero la vida del autor de una de las sagas más famosas de la historia de la literatura, no debería pasar por alto. Aunque la película Tolkien intenta reflejar la fascinación del autor por todo lo fantástico y de temas comunes como el amor, la amistad y la guerra, se queda bastante lejos de un producto digno.

La película Tolkien muestra la vida del autor antes de escribir las obras que lo harían famosos. Verás lo difícil que fue su infancia al quedar huérfano, pero también verás cómo encuentra la amistad, el valor y la inspiración en un grupo de compañeros escritores y artistas en la escuela. Esta hermandad perdura a través de los años, aún cuando el amor complica las cosas y la Primera Guerra Mundial estalla.

¿Vale la pena ver la película Tolkien?

Uno de los temas centrales en la obra de J.R.R. Tolkien es la amistad y en esta cinta podemos ver que es parte esencial de su vida. Desde temprana edad conoce a tres jóvenes que se convierten en sus amigos y en la fuente de su inspiración. Después de todo son un grupo de apasionados que quieren cambiar al mundo con arte (muy al estilo de La Sociedad de los Poetas Muertos).

Obviamente sabrás que este cuarteto de amigos inspiraría al grupo de nobles hobbits de El Señor de los Anillos. Sin embargo, la película Tolkien falla al no darles una personalidad propia y definida a cada uno de estos individuos. Al final se sienten como un elemento más para desarrollar la historia y no trasciende la relevancia de su amistad.

Foto: Fox Searchlight Pictures

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La película Tolkien no le hace justicia al brillante autor

No hay duda de que J.R.R. Tolkien es de las personas más brillantes y creativas que han pisado la Tierra. Más que inventar personajes, creó todo un universo y hasta un idioma para contar la historia de este mundo conocido como Tierra Media. Cierto es que todos queremos saber de dónde nace esta pasión por concebir nuevas palabras; lamentablemente, la película Tolkien no resuelve esa duda, aún cuando el tema de la lengua es muy recurrente en la trama.

El autor es interpretado por Nicholas Hoult (Dark Phoenix, La Favorita), quien regala una gran actuación. Tan solo con algunos gestos refleja a la perfección la gran confusión por la que la mente del autor navegaba en su vida diaria. Sobre todo al momento de llegar la guerra, pues su mundo imaginario comienza a verse invadido por una de las más crudas realidades.

Foto: Fox Searchlight Pictures

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El diseño de vestuario y la ambientación están muy bien logrados para una biopic de la época. Sin embargo, es una lástima que la película Tolkien no le haga justicia a la gran imaginación que tenía el autor. Por supuesto, cuenta con momentos que hacen gran referencia a sus obras, tales como la creación de una comunidad (como la que ayudó a Frodo a llevar el anillo a Mordor), o militares que, con sus máscaras y montados a caballo, se asemejan a los Nazgûl. Sin embargo, estos elementos se sienten como una solución muy sosa para ligar los acontecimientos de la vida de Tolkien con su obra, algo que, por ejemplo, sí está bien ejecutado en Finding Neverland, biopic de James M. Barry, donde hay una perfecta armonía entre la realidad y la ficción.

La intención general de la película Tolkien es buena, pues refleja cómo es que los artistas encuentran su propia voz e inspiración con los acontecimientos que les suceden a una edad temprana. Además, también plasma cómo es que transforman su pena y su dolor en arte.

No obstante, esto no es suficiente, ya que la trama carece de encanto y de imaginación y en eso radica su gran defeto si hablamos de la vida de alguien como J.R.R. Tolkien.

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