Quizás a ti ya no te tocó y solo lo conoces por el cine de oro mexicano. Pero hace muchos años, antes de la llegada del metro, los chilangos utilizaban un transporte colosal, barato y que cubría varias zonas de la ciudad. Hablemos de la historia del tranvía en la CDMX.

El tema del transporte siempre ha sido muy particular en la capital. Pues aquí hemos tenido canoas que recorren acequias y hasta barcos de vapor. Pero uno de los vehículos más añorados es el tranvía.

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El antecedente del tranvía en la CDMX

Aunque el barco de vapor fue innovador en su momento, no perduró por la desaparición de los canales de la ciudad. Sin embargo, al mismo tiempo surgió el antecesor del tranvía eléctrico.

Se trataba de las primeras concesiones para algunos ferrocarriles de vapor que transitaban dentro de la misma ciudad. Sin embargo, también nacieron lo que se conocen como tranvías de mulitas.

Estos eran vagones donde el principal era enganchado a un par de caballos o mulas que ponían todo en movimiento. Este transporte también era conocidos como “trenes de sangre”.

Estos tranvías se fabricaban en Estados Unidos por la empresa John Stephenson Co. Tenían su estación principal en el Zócalo y de ahí partían a casi todas las calles de la ciudad y poblaciones importantes.

De acuerdo con Mario Camarena y su texto El tranvía en época de cambio, para 1882 la red ya contaba con 112 km de vías  incluía a casi todas las municipalidades del valle: la Villa de Guadalupe, Tacubaya, Coyoacán, Mixcoac, San Ángel, Tlalpan, Xochimilco, Cuajimalpa, Tacuba, Azcapotzalco e Iztapalapa.

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Historia del tranvía en la CDMX

Pero en 1896 todo comenzó a cambiar, pues se autorizó el uso del tranvía eléctrico que utilizaba el Trolly System o cableado aéreo. En 1898 se creó el Taller y Plantas Generadoras de Indianilla y dio inicio a las obras de cambio de vías y construcción de redes eléctricas en algunas líneas ya existentes.

Así fue como el 15 de enero de 1900 se inauguró formalmente el servicio de tranvías eléctricos. Ese primer tramo iba del Zócalo a Tacubaya. Tenían una capacidad para 24 y 36 pasajeros; el primero mostraba seis ventanillas en sus costados, y el segundo nueve.

Retomando el texto de Mario Camarena, sabemos que en ese año se inauguraron las rutas: México (Zócalo)-Guadalupe, Peralvillo-Belén, Tacubaya-Mixcoac, México (Zócalo)-Tlalpan y Chapultepec-Dolores.

Pero no solo cambió la forma de transportarse en la ciudad, sino también la manera de vivir. Camarena menciona que las rutas de estos tranvías también generaron la creación de varias colonias.

Por ejemplo, gracias a la ruta de Tacuba se crearon las colonias San Rafael, de los arquitectos, Santa Julia y Romero Rubio. Así fue como poco a poco todo el Valle de México comenzó a poblarse más y más.

La Revolución no detuvo a este transporte, pues en 1912 se inauguró la vía de Iztapalapa y asistió el entonces presidente Francisco I. Madero. Meses después también se inauguró el servicio de tranvía eléctrico en Cuajimalpa. 

Se apaga una estrella: la llegada del trolebús y el metro 

La historia del tranvía en la CDMX se mantuvo durante varias décadas. Sin embargo, con la llegada de los autobuses y automóviles a la ciudad, su situación se puso en peligro.

Y es que llegó un momento donde era tanto el parque vehicular de camiones y carros que ya hasta invadían los carriles del tranvía, por lo cual se ralentizaba el servicio. Lo mismo sucedía cuando había fallas eléctricas o algún tranvía se descomponía.

Pero un accidente aceleró la desaparición de este transporte: en 1953 ocurrió el choque de dos tranvías que provocó 63 muertes. Con esto, muchas personas dejaron de verlo como un transporte seguro.

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Además, llegaron los trolebuses, los cuales ya no necesitaban rieles para trasladarse. Al mismo tiempo, en 1967 comenzó la construcción del Sistema Colectivo Metro.

Como ya sabemos, la limusina naranja rápidamente se convirtió en el transporte favorito de los chilangos en los 70. Y por si eso no fuera poco, la creación de los Ejes Viales terminó de matar la historia de los tranvías en la CDMX, pues se le dio preferencia al uso de los trolebuses. 

Finalmente, en 1979 desapareció prácticamente este transporte; Sus últimas cinco rutas fueron retiradas. Y también dejó de funcionar el “tranvía cero”, que hacía rutas turísticas desde 1971 del Cine México a la Glorieta de Chilpancingo. 

La nostalgia viaja en tranvía

La historia de los tranvías en la CDMX abarcó gran parte del siglo XX. Puedes preguntarle a tus papás o abuelos sobre este transporte y de cómo era viajar “de mosca”.

Pero para que te des una idea, estas son algunas de las rutas que tuvo este transporte en la CDMX:

  • Tacubaya-La Venta (Cuajimalpa)
  • Zócalo-Coyoacán – San Ángel
  • Zócalo-Santa María la Rivera
  • Zócalo-La Villa
  • Zócalo-Tlalpan
  • Tacubaya-CU
  • México-Xochimilco 

¿Te gustaría que regresara este transporte? ¿Te hubiera gustado conocerlo? Cuéntanos qué recuerdos te han compartido tus papás o abuelos.

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