Durante el homenaje de José José en Bellas Artes hubo de todo: canciones, recuerdos, lágrimas y muchas anécdotas del Príncipe de la Canción. 

A casi dos semanas de su muerte, los restos de José José llegaron a México. Cientos de personas arribaron desde las 5:30 de la madrugada de este miércoles 9 de octubre al Palacio de Bellas Artes, para despedirse de él, acompañados de playeras, discos, cassettes, pósters y hasta fotografías autografiadas por el artista. 

Norma, vecina de la colonia Tlatilco, en Azcapotzalco, acudió al homenaje, pues prácticamente gracias a José José sus papás se enamoraron. En entrevista con Chilango, la joven relató que su papá estaba muy enamorado de su mamá, así que para conquistarla le pidió de favor al Príncipe de la Canción (quien en ese entonces vivía cerca de dicha colonia) que lo acompañara a llevarle serenata.

“Jugaban mucho futbol y luego iban a comer. En una ocasión, mi papá le comentó (a José José) que le gustaba una muchacha y le pidió ayuda. Tres veces le llevaron serenata y la tercera fue la vencida. Gracias a Pepe, mi mamá le dio el sí a mi papá”, confesó Norma. 

La amistad entre el papá de Norma y el artista duró muchos años más. De hecho, uno de los recuerdos más entrañables que Norma tiene del Príncipe de la Canción es cuando tenía cinco años y recibieron la visita del artista en su casa. 

“Fue a visitar a mi papá y me regaló una bolsa de dulces. Me da tristeza todo esto, pero también me emociona el ver a toda la gente que quiere a Pepe; él significa muchísimo para mí”, aseguró. 

Foto: Karla Almaraz

También lee: Fotos y videos: el último adiós a José José en CDMX

“Quiero verlo por última vez”: lágrimas y canciones en el homenaje de José José en Bellas Artes

Desde la primera vez que Isaura Hernández, habitante de la colonia Guerrero, en la alcaldía Cuauhtémoc, escuchó cantar a José José quedó enamorada de él. Desde sus 20 años, la ahora señora no se perdió ninguno de sus conciertos y muestra con orgullo la fotografía que se tomó con él en el Teatro Blanquita. 

“Iba a verlo a todos lados. Aunque ya no podía cantar yo quería verlo. Me causa tristeza que ya no está con nosotros; espero al menos poder despedirme de él, poder verlo aunque sea por última vez”, explica sin poder evitar que su voz se quiebre. 

Foto: Karla Almaraz

A escasos metros de Isaura se encuentra Eulalio González, quien salió desde la madrugada de su casa, en Naucalpan, Estado de México, para ser uno de los primeros en llegar. Él recuerda que siempre se sintió orgulloso de trabajar cerca de donde vivía José José, en Azcapotzalco, hace más de 50 años, cuando apenas empezaba su carrera.

El cariño que muestra la gente le gusta tanto que, pese a que fue uno de los primeros en pasar a Bellas Artes, lleva más de seis horas cantando junto a los demás asistentes. 

Incluso hasta cambió algunos versos de la canción Adiós a Pedro Infante, de José Alfredo Jiménez, para darle un homenaje a José José como se debe: con música. 

“Nuevamente se ha enlutado el firmamento
se estremece todo el pueblo mexicano
las estrellas ya lloraron en silencio
por la voz que para siempre se ha apagado.
Fue su cuna Clavería, tierra amada,
desde donde fue llegando hasta la fama
más no supo que la muerte lo esperaba,
escondida allá, en la tierra americana”.

Foto: Karla Almaraz

Aunque el homenaje se realizó al interior del Palacio de Bellas Artes, afuera, las canciones no pararon, ni siquiera cuando partieron las cenizas del intérprete. El Triste, 40 y 20, Almohada y Gavilán o Paloma, entre muchas otras, se entonaron una y otra vez para recordar al Príncipe de la Canción.

También te puede interesar: Estos son los cierres viales por el homenaje a José José