Ubicado a unos pasos de la Plaza de las Tres Culturas, el Jardín Santiago de Tlatelolco constituye uno de los secretos mejor guardados de la capital. Su belleza, arquitectura y abundante vegetación se combinan en perfecta armonía para crear un ambiente de calma en medio del bullicio urbano. Aquí te compartimos la fascinante historia de este hermoso parque. ¡Conócelo!

Historia del Jardín Santiago de Tlatelolco

A la par de los edificios que conforman la emblemática Unidad Habitacional de Tlatelolco, el Jardín Santiago fue inaugurado a mediados del siglo XX. Su ubicación y diseño, a cargo del arquitecto Mario Pani, fueron pensados para el disfrute de las nuevas familias que se instalaron en la zona durante aquella época.

Aunque se trata de un jardín “joven” si lo comparamos con otros recintos de la capital, como la Plaza central de Tlalpan o el Jardín Centenario de Coyoacán, la historia de su emplazamiento podría remontarse hasta hace casi 500 años.

En efecto, durante el siglo XVI, se extendía sobre este territorio el convento de Santiago Tlatelolco y el Colegio de la Santa Cruz, el cual constituye la primera institución de educación superior en América Latina. De hecho, como recuerdo de este pasado remoto, el jardín actual conserva una hermosa cruz atrial entre sus áreas verdes.

Con la construcción del Conjunto Urbano Nonoalco Tlatelolco en 1957, Mario Pani buscó crear un espacio de armonía y descanso que formara parte de su plan integral. Así, tomando como punto de partida el Jardín de San Marcos de Aguascalientes, replicó la hermosa balaustrada que delimita con la calle y colocó cuatro arcos de entrada en cada uno de sus flancos.

Fue de este modo como nació el Jardín Santiago, el cual tuvo su inauguración durante el año de 1965. Desde entonces, se ha convertido en un oasis de paz y silencio para locales y visitantes de la zona.

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Un templo clásico en medio de la ciudad

Este parque chilango, situado entre las grandes avenidas de Reforma y Ricardo Flores Magón, nos recibe con cuatro puertas de piedra rematadas con arcos de grandes dimensiones. Al entrar desde cualquiera de ellas, podemos contemplar su deslumbrante centro y percibir la belleza de sus frondosos árboles.

En medio del parque se encuentra un bello templo monóptero al estilo de las antiguas construcciones romanas que te hará sentir en otras épocas: Se trata de una planta circular hecha de piedra que sostiene su bóveda con diez columnas dóricas en perfecta simetría.

La parte interna de la estructura alberga la famosa Ordenanza de Cuauhtémoc: “Aquí ponemos y asentamos en la forma que hallamos la laguna grande, como atijereada: sus olas como plata y brillantes como el oro, tan fragante y olorosa, donde fundamos nuestro pueblo de Tlatelolco”. Asimismo, si te colocas justo en medio del templo, podrás notar el peculiar efecto sonoro que crea la bóveda.

Cabe destacar que este jardín también se ha convertido en el hogar de una amplia colección de plantas y árboles; se estima que sus áreas verdes cuentan con más de 60 especies diferentes y que al menos 10 de ellas son endémicas.

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Conoce el Jardín Santiago

Si quieres dar un paseo por este espacio, te contamos que su entrada es gratuita y que se encuentra abierto las 24 horas. Una vez en el lugar, te sorprenderá la atmósfera de calma y silencio que ofrece el lugar, a pesar de situarse entre avenidas importantes de la ciudad.

En este jardín te encontrarás con habitantes de la zona, personas de la tercera edad, jóvenes artistas y personas que salen a tomar un paseo con sus perros. Para seguir disfrutando de los encantos de este hermoso lugar, te invitamos cuidar sus instalaciones durante tu visita y no dejar basura en el lugar.

¿Ya conocías el Jardín Santiago de Tlatelolco? ¡Lánzate a recorrerlo en tu siguiente oportunidad! Antes de irte, te recomendamos echarle un ojo a: Vaya, vaya, 5 lugares bonitos de Tacubaya con mucha historia y tradición 🏛️🌺.