Huye de la ciudad y entra en calor en estos lugares paradisíacos ideales para vacacionar en el invierno. Eso sí: no olvides el cubrebocas, los lentes oscuros y el bloqueador.

Playa Algodones San Carlos, Sonora

Playa Algodones
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El paisaje desértico contrasta con el azul del mar. Agua tibia y cristalina, perfecta para nadar y vacacionar en el invierno. Dunas, pelícanos pescando a tu lado y el rumor de los peces. La postal es, sin exagerar, una de las más hermosas que verás en la vida. Para comer: mariscos frescos y tacos en tortillas de harina de a de veras, de las norteñas. En sus playas nadie interrumpirá tu paz.

Tip: instálate en el restaurante Soggy Peso; tiene baños, buena música y excelente comida.

Puerto Morelos, Quintana Roo

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Toda la belleza del Caribe, sin la actitud springbreaker de Cancún ni los exorbitantes precios hippy chic de los tuluminatis. Gracias a la barrera de arrecifes, el oleaje es bajo y hace de ella una playa perfecta para practicar el windsurf, esnorquelear y vacacionar en el invierno.

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También es ideal si simplemente prefieres relajarte bajo una palapa, pues sus aguas color turquesa y su arena blanca y ligera te harán querer volver, volver, vooolver. Además está cerca de la ruta de cenotes.

Tip: de paso visita Yaax Che, también conocido como Jardín Botánico Alfredo Barrera Marín, el más grande del país.

Aguas Termales de Atotonilco Manialtepec, Oaxaca

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Si estás en Puerto Escondido o cerca, madruga y visita Casa Wabi (previa cita) y luego ve a Manialtepec, donde un caballerango prepara tu transporte para cabalgar en medio de frondosos paisajes y cruzar el río siete veces, es un espacio ideal para vacacionar en el invierno.

El agua te llegará a las pantorrillas. La aventura valdrá la pena; te relajarás en las aguas termales, cristalinas, llenas de minerales.

Tip: la cabalgata dura un rato; lleva sombrero y bloqueador.

Las Granadas, Guerrero

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A una hora de Taxco se encuentra esta maravilla natural, también conocida como Mil Cascadas. En medio de la selva practica senderismo y rappel, descubre grutas y cavernas o date un chapuzón en una de sus pozas, mientras escuchas correr el río. Hay opción de acampar.

Tip: prepara tu navegador antes, pues en momentos del camino no hay buena señal.

Pie de la Cuesta, Guerrero

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El hermano alternativo de Acapulco. Acá el plan es sólo meter los pies al mar, pues sus imponentes olas te impedirán chapotear mucho. Es, sin embargo, el lugar perfecto si quieres ir a una playa cercana pero sin tanto barullo para vacacionar en el invierno.

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Además, como en el resto del Pacífico, los atardeceres son espectaculares, y tiene la ventaja de que cuando vayas podrás sumar a tu plan una visita a la laguna de Coyuca, donde hay recorridos en lancha y liberación de tortugas.

Tip: hospédate en un Airbnb y pasa una tarde en el Vayma Beach Club.

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