Los contagios, las muertes y la saturación de hospitales a causa del COVID-19 es solo una parte de la emergencia sanitaria que enfrentamos. Pacientes con VIH de diversos hospitales en la CDMX denuncian desabasto de medicamentos antirretrovirales, por lo que exigen que no se les abandone.

Carlos (quien prefiere no dar su nombre real) fue diagnosticado con VIH en 2014 y es uno de los chilangos que enfrenta las consecuencias del desabasto, así como el peligro latente de contagiarse de COVID-19: ”Desde febrero hemos estado asistiendo a nuestras citas, pero no nos dan nuestros medicamentos. Nos arriesgamos a contagiarnos por coronavirus, y a nadie le importa. Solo nos dan las recetas y nos dicen que nos esperemos al otro mes”.

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Como esta historia, hay miles en la ciudad y en el país. De acuerdo con los datos más recientes del Centro Nacional para la Prevención y el Control de VIH y SIDA (CENSIDA), en México, 179 mil 640 personas tienen VIH, de las cuales 87 mil 571 desarrollaron Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).

Marina Estrada forma parte de esta población y lleva dos meses sin recibir los medicamentos de su tratamiento, por ello, exige a las autoridades una solución a este problema.

“¡Basta ya de maltrato! Entréguenos los medicamentos de inmediato, no pongan en riesgo nuestra salud. Exigimos al ISSSTE que nos resuelva en varios hospitales, como en ‘Zaragoza’ y en ‘López Mateos’, principalmente”, solicita Mariana.

Al igual que el coronavirus, el VIH fue catalogado como pandemia desde 1981, cuando se dio el primer caso de SIDA. El virus se extendió por todo el mundo en cuestión de meses. En las últimas dos décadas, los casos disminuyeron considerablemente gracias a los avances científicos y el acceso a los tratamientos para controlar y disminuir la carga viral, conocidos como antirretrovirales (ARV), los cuales hacen indetectable el virus en la sangre, y por lo tanto, intransmisible.

Para evitar que las personas se queden sin medicamentos y reducir la necesidad de acceder al sistema de salud, los países deberían pasar a la plena aplicación de la dispensación multi-mensual de tres meses o más de tratamiento contra el VIH, recomienda la ONUSIDA, la comisión de la Organización de las Naciones Unidas que tiene como objetivo acabar con la pandemia del VIH.

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Georgina Gutiérrez Alvarado, es una de las personas que encabeza en México las protestas para exigir un alto al desabasto de medicamentos, pues además de ser psicóloga y activista, es paciente con VIH controlado desde hace dos décadas. Desde entonces su lucha se ha extendido por toda la República bajo el Movimiento Mexicano de Ciudadanía Positiva. Ahora, muchos de los pacientes con VIH protestan -virtualmente- junto a ella para no quedarse sin los antirretrovirales.

“Una de las afectadas me dijo: ‘Gina, a mí me atienden en un hospital del ISSSTE, en Tacuba, designado para COVID-19. Sí me dieron recetas para tres meses, pero tengo tanto miedo de contagiarme del coronavirus que prefiero no ir a surtir mis recetas’. Y de todas formas, les hacen ir, mes por mes, como si no hubiera Fase 3”, comenta Georgina.

Aunque actualmente no hay evidencia científica de que las personas con VIH en la cuarentena corren más riesgo de contagiarse por COVID-19, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), sin el tratamiento antirretroviral podrían adquirir cualquier infección o enfermedad leve que podría resultar en la muerte, explica el epidemiólogo Christian Gómez Salinas.

El 79% de los pacientes con VIH en la cuarentena -en América Latina y el Caribe- no tiene suficiente medicamento ARV para los próximos tres meses, de acuerdo con cifras de la ONUSIDA, obtenidas del primer cuestionario sobre la Demanda Comunitaria de PVVIH.

De este porcentaje, 13% indicó que su medicamento se agotaba antes de un mes, 31% respondió que tenía suficiente para al menos otro mes, y solo 11% para otros dos meses, señala dicho informe.

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“Lamento mencionarles que los que acabamos de recibir medicamento no nos van a dar la de este mes (por ejemplo, lo correspondiente a la receta del 22 abril) nos están citando el día 11 de mayo para poder surtir medicamento, todo derivado a que el sistema no puede dar dos medicamentos en un mes. Y que este mes de abril sólo es para regularizar a los pendientes de marzo. Y por lo que vi cambiaron la presentación o proveedor del medicamento atripla”, comenta un derechohabiente del ISSSTE “Ignacio Zaragoza”, cuya identidad prefiere mantener anónima.

Contagios de COVID-19 en pacientes con VIH

Hasta el 19 de abril, en México se habían registrado cinco defunciones de pacientes con VIH tras contagiarse con COVID-19, así como 10 personas con esta enfermedad infectadas, de acuerdo con el reporte de la Secretaría de Salud, dado a conocer durante la conferencia vespertina en la que se informa el balance diario de la pandemia en México.

La razón principal por la cual fallecieron estas personas con VIH en cuarentena radica en la depresión de su sistema inmunológico, es decir, porque tenían las defensas bajas y débiles, de acuerdo con la explicación médica coloquial. Es importante aclarar que esto no necesariamente significó una relación directa entre el COVID-19 y el VIH.

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“No toda persona que vive con VIH tiene una depresión del sistema inmune, eso debe quedar muy claro. Pero hay una proporción que sí lo tienen porque no han entrado en control viral del VIH o tienen ya un avanzado deterioro del estado de inmunidad al momento de su diagnóstico, por eso hacemos un llamado, siempre lo hemos hecho, a hacerse la prueba de VIH”, así lo explicó el funcionario y también especialista en Epidemiología, Hugo López Gatell.

Asimismo, el infectólogo y también funcionario Gustavo Reyes Terán agregó en la misma conferencia: “Las personas con VIH que reciben tratamiento antirretroviral y están perfectamente bien controladas (eso significa que su carga viral está indetectable, sus CD4, sus células de defensas están dentro de lo normal) pueden tener un resultado al infectarse con el SARS-CoV-2 muy similar al de la persona que no tiene VIH”.

Respuesta de las autoridades responsables

Para saber saber la versión institucional sobre el desabasto de medicamento antirretroviral, Chilango contactó a personal del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), pero no obtuvo respuesta.

De acuerdo con los pacientes con VIH, el ISSSTE les ha contestado que no han surtido los medicamentos, pero probablemente para el 11 de mayo termine el desabasto, principalmente de Ritonavir, Atripla, Efavirenz, Atazanavir, Raltegravir y Abacavir.

“Hasta el momento no nos han dado la cara, hemos realizado diversas manifestaciones virtuales y nada de nada. Esperemos que nos resuelvan pronto y no nos priven de nuestros medicamentos en esta cuarentena, porque todo el tratamiento de años se podría venir abajo”, comenta Mariana Estrada, quien lleva 3 años de tratamiento ARV.

De acuerdo con Miguel, otro paciente que prefiere el anonimato, en algunos hospitales ya están atendiendo el desabasto luego de sus diversas protestas virtuales, no obstante siguen desfasados en las entregas: “Lo que estamos peleando es que se pongan al corriente porque algunos pacientes pidieron prestado medicamento a quien sí tenía y hay que devolver a quienes prestaron, sino es un desabasto en cadena que no termina”.

Tanto la Secretaría de Salud federal como local y los gobiernos federal y de la CDMX no han emitido ningún comunicado de prensa para reconocer el desabasto de medicamentos para atender VIH en cuarentena, razón por la cual los pacientes se sienten abandonados.

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Desde las últimas semanas, la ONUSIDA ha emitido de manera constante la recomendación de que no se deje de aplicar o abastecer medicamentos a las personas que tienen VIH en cuarentena, siempre bajo la perspectiva de garantizar los derechos humanos universales, como es el acceso efectivo a la salud.