La historia de Setsuna es trágica por donde la veas. Vive en un mundo de perpetuo invierno y repleto de bestias hostiles que sólo se calman si una doncella es sacrificada cada cierto tiempo. Resulta que una de esas doncellas es ella. Así que se embarca en un viaje hacia su destino final para salvar a su gente, junto con un grupo de guerreros cuyo destino no es nada brillante tampoco.

I Am Setsuna es un ejemplo muy loable de Square Enix por regresar a sus viejas glorias de RPGs japoneses clásicos, por lo que en este juego te vas a encontrar todo tipo de referencias (por no decir clichés) a títulos como Final Fantasy o Chrono Trigger. Y esto no es malo, porque en realidad todos los fans claman para que los RPGs regresen a sus orígenes y dejen de tener tanta influencia de los juegos occidentales o de los FPS, ¿o no?

Pues este título cumple con esa premisa de regresarnos a esos buenos tiempos, pero no por ello podemos decir que sea perfecto.

Para empezar tenemos la trama que efectivamente es sombría y llena de tristeza. Los personajes algunas veces expresan ciertos chistes muy tontos, pero en general te identificas con los pesos que tienen que cargar, sus conflictos y filosofía. Eventualmente, y conforme los conozcas más y más, te darás cuenta de que los verdaderos enemigos del juego no son las bestias sino todo el equipaje emocional de tu party, sus secretos, sus arrepentimientos y hasta su mala suerte. En resumen: puede que este título te deprima, lo cual no es forzosamente malo.

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Lo que sí es malo es que el guion se clava demasiado en el dolor, sin conocer demasiado las causas. Todo estaba puesto para conocer mucho más a los personajes y sus historias, pero la trama se queda corta.

Por otro lado, las batallas son algo de lo que más me gustó porque tienen una mezcla entre lo clásico y lo más nuevo. Es decir, las tomas son dinámicas tanto en la exploración como en las batallas, pero es aquí donde es importante la posición de la cámara y la distancia de los personajes respecto a los enemigos, porque el sistema de combate es activo, por lo que algunos ataques son más o menos efectivos dependiendo de tu posición en la arena de combate. También retoma el Active Time Battle System de Final Fantasy, por lo que deberás esperar entre tus movimientos, pero tampoco te distraigas porque si te tardas demasiado al navegar entre los menús, los enemigos tomarán otro turno.

Otra cosa que me gustó es que siempre puedes ver a los enemigos antes de entrar en combate y también que la personalización es clara (aunque no aporta nada al género). Hay una combinación entre personalización activa (decisiones que tomas durante las batallas) y pasiva (cosas que haces antes de las batallas). Así mismo, al subir de nivel sólo crecen tus niveles de HP y magia, pero todos los demás aspectos tendrás que ajustarlos mediante tu equipo.

Como puedes ver por todo lo anterior, prácticamente cada aspecto de este título es una combinación entre elementos retro y modernos, lo cual en realidad es una combinación afortunada y muy bienvenida, por lo menos para mí, pero a veces era demasiado familiar.

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Aprender a administrar tus recursos, a personalizar a tu party y a pelear es complicado al inicio pero después de unas horas de juego, serás todo un maestro, así que no le tengas miedo a este juego por su género.

El objetivo de I Am Setsuna era ser un RPG japonés con muchos toques clásicos, y lo logró, por lo tanto no esperes demasiada innovación ni un ritmo rápido, como ahora estamos tan acostumbrados.

I Am Setsuna
Desarrolla: Tokyo RPG Factory
Publica: Square Enix
Clasificación: E 10+ para todo público mayor de 10 años
Consolas: PC, PS4, Vita
Salida: 19 de julio 2016

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