En estos festejos del Bicentenario en lugar de andar paseando los restos
de Miguel Hidalgo y de José María Morelos por pleno Centro Histórico,
deberían edificarle una estatua a Javier Hernández, "El Chicharito". Qué Maradona ni qué Maradona.

Chicharito le dicen y está destinado a cosas grandes. O tal vez no…

Javier Hernández está vuelto loco. Lo mismo mete goles con la cara que
agota los jerseys con su nombre en Inglaterra.
Hasta ahí todo bien.
Increíble que a un jugador mexicano le vaya chido en otras ligas, en
especial si es la Premier League y si es con el logo del Manchester
United
. El problema empieza cuando con menos de 10 partidos
jugados ya lo vuelven leyenda. No, no,no, así no funcionan las cosas.

Recuerden que ha habido muchos que se van al otro lado del charco y no
la hacen, que en 10 minutos los vuelven héroes y que después quedan en
el limbo.

Porque hay algunos que…


En fin, suerte para el Little Pea y que se convierta en el nuevo Cantona. Ajá.