Sabemos que para muchos chilangos es duro, harto difícil, no ir a pasear con los amigos, salir a la carnita asada, chacharear en el tianguis, además de echar la chela con los cuates, que estos días escasea, y no se reanudará la producción hasta el 1 de junio. Pero mientras el semáforo de la “nueva normalidad” se pone en marcha, te dejamos algunos motivos por los cuales extrañas ir a pensar cosas al tianguis.

11 razones por las que extrañas ir a pensar cosas al tianguis

La cháchara

Al que le den pan que llore, y vas a llorar mucho, esas botas Dr. Marten’s ya medio usadas, los lentes (bueno el armazón) más retro de la vida y algunas fotos vintage para armar el collage acá bien histérico, ¿A poco no extrañas todo esto?

La paca

Uy, uy, uy, uno de los mejores lujos a la hora de ir a pensar cosas al tianguis. Nos encanta comprar bueno, bonito y barato. Aunque ahora con la “nueva normalidad” quizá tardemos un par de meses (años) en poder buscar gangas de Nike, Levi’s y más traídas del gabacho, o de quién sabe dónde.

Los tenis

Buenos, no sé sabe, pero baratos sin duda. En algunos montones de La Lagunilla, Tepito, La Merced y Granaditas se podían hallar copias chidas, unas menos agraciaciadas y tenis gringous a buen precio. Algunas marcas nacionales y productores del país también se ofertan en estos lugares, pero el tenis de moda y de novedad es lo que cautiva a los marchantes dispuestos a decir “ya es lo menos”, “de a cómo y por qué tan caro”.

Las miches

Un domingo de bajón puede ponerse chido con las clásicas miches de La Lagunilla, ya de paso te rifas por un par de papos nuevos, le das una mirada a su tianguis de ropa barata y para toda ocasión o de plano te llevas ese mueble que le hace falta a tu depa. Ojo aquí, las miches eran el pretexto para verte con tus amigos después de un sábado de fiesta.

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Las antigüedades

Antes de la “señora de las plantas y los gatos” existió, dicen por ahí, entre el largo sendero de La Lagunilla y El Oro un chilango (a) buscador de tesoros viejos, de cómodas, de ventanas, y hasta de mesas de centro con toques art decó y bien despostillados, quesque para darle un toque vintage a su hogar. La verdad es que sí hay muchas cosas padres en ambos tianguis mencionados, y siempre vale la pena ver la variedad.

Los huesitos

Una chupadita por aquí, una lamidita por allá. Y es que nadie puede jactarse de ir a pensar cosas al tianguis, sin pasar por un taco de huesitos de puerco bien ricos, bien qué deliciosos. Además, la mayoría de los tianguis ofrece todo tipo de alimentos básicos en la dieta de cualquier chilango que se respete.

Los cerillos

Una variante de las micheladas, un divino tesoro para los que antes de la crisis por el coronavirus vivían menos preocupados de las infecciones y las enfermedades. Estas míticas creaciones (se dice endémicas de Tepito) desafían las leyes salubres, ah, pero cómo alivianan la cruz.

Las imitaciones

Aquí el límite no existe. Consolas, lentes, accesorios para celular, ropa, zapatos y hasta medicamentos (así cómo lees), existe una amplia variedad de mercado para las imitaciones, la mayoría de origen asiático, y los chilangos éramos -somos- fans de ir en su búsqueda a Eje Central, Plaza Meave, La Plaza de la Computación, La Paca de la Raza y más, mucho más.

El cine inaccesible

ya sea de tres por cincuenta o bien cada una en quince pesos, las pelis de arte y los estrenos conviven juntos en la mayoría de tianguis chilangos, algunos “con calidad casi, casi como de original”o eso dicen los comerciantes. No apoyamos la piratería, jamás, pero mucha gente ve su domingo de surtirse con estos especialistas de puesto de lona que a veces tienen más visión del ´séptimo arte que los críticos emergentes del Oscar en Twitter.

El juguete de moda, de novedad

Slime, arena mágica, los padrinos mágicos, el peluche de Pokémon con un ojo medio bizco, aquí la imaginación del chilango no encuentra freno y menos si se trata de juguetes de novedad. Uno puede encontrar en 5 de febrero, el tianguis del juguete y la calle del peluche toda clase de creaciones a buenos precios, eso sí, sin garantía de que aguanten muchos días de juego.

La ropa de los michis/lomitos

Para aquellos que buscan los rascadores de sus michis, la ropa de moda para el lomito, una cama nueva, juguetes y hasta correas que parecen más para ellos que para sus mascotas pueden armar su agosto en los tianguis especializados de mascotas en la Ciudad de México, ya después de unas plantas, una miche pues la ropa del lomito, sí señor.

Estas podrían ser solo algunas de las razones por las que ya te urge que abran el tianguis de tu colonia, pero poco a poco, aguanta un poco más, ya pronto podrás ir a pensar cosas al tianguis.

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