Un grupo de Activistas pidió a la Procuraduría General de Justicia capitalina investigar la matanza en un Centro de Control Canino de Tláhuac, donde mas de 250 perros y gatos murieron electrocutados.

En un comunicado, defensores de los derechos de los animales acusaron a la directora del centro, Laura Villegas, de violentar la ley al electrocutar a cientos de perros y gatos semanalmente.

También aseguraron que detectaron la venta de medicamentos a veterinarias particulares, ubicadas en la demarcación.

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Tras la denuncia, las autoridades de la Delegación Tláhuac separaron del cargo a la titular del centro canino y anunciaron que se realizará una investigación para que la Contraloría Interna deslinde responsabilidades.

También se comprometieron a realizar los procesos administrativos necesarios y cambiar los protocolos para atender a los animales de compañía en situación de calle y así eliminar el concepto de control canino para dar paso a la Clínica Delegacional Veterinaria.

Las autoridades delegacionales anunciaron la implementación de acciones preventivas, como la esterilización, y combatir otras, como el sacrificio.