No es un secreto que el transporte público de esta ciudad ya está rebasado, y ni hablar de la odisea que es manejar a vuelta de rueda por más de una hora rumbo a nuestros trabajos o escuelas en trayectos que podrían ser más cortos. Para intentar solucionar eso comenzaron a llegar sistemas de bicicletas y scooters compartidos a la CDMX, sin embargo, no todo ha sido miel sobra hojuelas, ora porque no tienen cobertura en toda la ciudad, ora porque los usuarios las dejan tiradas por doquier. Debido a esta última razón, el gobierno capitalino lanzó el 1 de febrero los lineamientos temporales a scooters y bicicletas sin anclaje.

De qué van los lineamientos temporales a scooters y bicicletas

Todo chilango que haya caminado por Polanco, Condesa, Roma, Juárez, Narvarte, Del Valle, y más zonas concurridas —hipsteronas—, se ha percatado de la invasión de las bicis naranjas o las verdes, así como los scooters que parecen ser más que nosotros. Bueno, pues a partir del 1 de febrero, el gobierno capitalino lanzó unos lineamientos temporales a scooters y bicicletas sin anclaje —o sea, que no tienen estaciones como Ecobici—, pues al parecer las empresas dueñas de esos transportes funcionan como algún dios les dio a entender.

Primero que nada, todas las empresas operarán dentro de la misma área. ¿Qué quiere decir eso? Que la oferta tiene que se pareja para todas, pues había algunas que eran amas y señoras de alcaldías y no llegaban a otras pues eran territorio de la competencia. Desde ahora todas estarán en igualdad de territorios para que el usuario elija la que más le conviene y no la única que haya.

El segundo punto de estos lineamientos temporales de scooters y bicicletas es que tooodas las compañías, sin excepción, deberán contar con pólizas de seguros en favor de sus usuarios, además tendrán que dar seguimiento a los hechos.

También, como tercer punto, todos los datos estadísticos deberán ser abiertos para consulta de los ciudadanos y del gobierno capitalino. En cuarto lugar, todas las empresas estarán obligadas a regular su servicio para evitar aglomeraciones en banquetas y camellones —no se pasen, chiiiiiavos—. El quinto inciso hace hincapié en que las empresas deberán informar a sus usuarios las zonas designadas para estacionar sus unidades así como sus obligaciones como conductores de las unidades.

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En penúltimo lugar, se establecerán criterios estrictos para que se respeten las zonas peatonales y de protección civil. Y ya por último, el gobierno establecerá un control estricto para que cada empresa opere con un número máximo de unidades para que al rato no haya más bicis que chilangos.

¿Qué te parecen estos lineamientos temporales a scooters y bicicletas? Seguramente, más adelante, tendremos lineamientos oficiales para que todos nos transportemos mejor.