¿Por dónde empezamos? Primero ubiquemos a este personaje…

Quizá recuerden a este sacerdote católico porque alguna vez sugirió que las mujeres son violadas por "andar provocando"
, pero también lo puedes recordar porque ha sido investigado por presunto lavado de dinero (en su modalidad de narco limosna), o quizá lo ubicas por decir que "se necesita no tener madre para ser protestante".

Este polémico representante de la iglesia católica lo hizo otra vez. Parece no entender que en México el Estado está separado de la Iglesia (Estado laico) y esta vez se aventó una más de sus desatinadas declaraciones.


Frente al fallo de la Suprema Corte que permite la adopción de niños a parejas homosexuales, afirmó que este órgano se corrompió frente a sobornos de Marcelo Ebrard.

El pez muere por la boca… y vaya que tiene boca de pez

La cosa no quedó ahí, el jefe de gobierno del DF, no hizo caso omiso a la declaración y amenazó con demandarlo si no presentaba pruebas de lo dicho o se retractaba y pedía disculpas públicas, cosa que el monarca de la iglesia desde luego no aceptó.

Ahora sí lo hizo enojar el señor cura


Sandoval Íñiguez nunca se ha caracterizado por la humildad (principio católico), ni mucho menos por aquél otro principio cristiano que reza "No levantarás falsos testimonios, ni mentirás".

A ello le podemos sumar el pecado de la soberbia, la vanidad, gula (se le nota) y también que en él no aplica eso de amar al prójimo como a sí mismo, pues a todas luces desprecia a los homosexuales.

Lamentablemente el señor es perfecto ejemplo de intolerancia (otra no virtud cristiana) y gracias a jerarcas católicos como él la iglesia no se renueva, no evoluciona al ritmo de las sociedades y cada vez pierde más adeptos (sin sumar sus otros escandalitos) que ya nada tienen que ver con el dogma de la fe.

¡Qué bonito!

Entérate de más aquí.