Oyes escultura y piensas en arcilla, mármol o bronce, nunca en azúcar. Marithé de Alvarado fue la mexicana que trajo al país la técnica de escultura en este alimento, y la revolucionó hasta convertirse en una eminencia de la repostería, pero también del arte, para luego crear el Museo de Arte en Azúcar México

Por Sofía Viramontes

Ella nació en el Distrito Federal a principios del siglo XX, y tras acabar la preparatoria decidió, inspirada por su tía, una monja repostera, que quería tener la misma carrera. Sus primeros trabajos datan de 1937, cuando experimentó con flores de azúcar para decorar pasteles. Se percató de que esas piezas le producían gran alegría y que había amplias posibilidades creativas con los derivados del azúcar.

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Se fue a estudiar a Francia y aprendió los pormenores de la labor. Entonces comenzó a hacer esculturas detalladas, se hizo famosísima y recorrió el mundo con su talento. Al mismo tiempo, daba clases y escribía libros. Sus piezas fueron escalando de tamaño y muchas llegaron a medir varios metros. A los 92 años decidió retirarse y abrir un museo en el que se mostrara su obra. Así nació el Museo de Arte en Azúcar México (Maram).

La puerta del estudio ahora la abre Dulce María, su hija. Ella también hace esculturas en azúcar y se dedica a mantener el legado de su madre. El recorrido comienza con una vitrina de madera en la que se muestran las piezas más antiguas. La que está hasta arriba es de los años 40. Al lado se encuentra una alegoría de un salón de fiestas esculpida en 1966.

Como parte de la explicación del Museo de Arte en Azúcar México, esta repostera y artista (también ha dedicado su vida a pintar y a hacer performance) explica la teoría del arte de su madre, en la que hay tres fórmulas: el pastillaje, la pasta y el glass. Todo lo demás, como el fondant, no se utiliza para hacer esculturas de azúcar.

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La historia de Marithé de Alvarado es muy interesante y las piezas son, genuinamente, obras de arte. El acervo del Museo de Arte en Azúcar México tiene ahora más de 2 mil figuras, aunque no todas están expuestas porque el espacio es insuficiente. Las tres imperdibles son la cabeza con sombrero de flores, la tienda de sombreros y la escena árabe.

Museo de Arte en Azúcar México

Dónde: Av. Cuauhtémoc 950, Col. Narvarte Poniente

Cuándo: visitas sólo con cita previa al 5523 8434