La brújula culinaria nos lleva en esta ocasión a la Nápoles, donde se estacionó un singular espacio de cocina japonesa. Chaen Café es sencillo, tradicional y ofrece auténtica comida asiática a un precio imbatible. La consigna de este lugar es ser el refugio de las personas que gustan de la gastronomía asiática, pero no están dispuestas a drenar la cartera.

Las opciones en el menú se reducen a tres: la primera y la más popular es un shokado bento, que consiste en una caja de cuatro apartados donde se coloca arroz o sushi, un rollo primavera, tempura o pescado del día y ensalada de alga. A esto se le suma una ensalada, una sopa miso y un té por $150. Las opciones cambian semanalmente, lo que permite revisitar el restaurante a lo largo del mes. Otras alternativas son el ramen frío y el curry con arroz.

Aunque el lugar parece un poco abandonado por el pasado, el costo y sazón juegan a su favor. Así como su washitsu, un pequeño cuarto tradicional donde puedes ir más allá de la comida y vivir la cotidianeidad nipona. Ahí encontrarás una mesa baja y piso de tatami –tapetes típicos–. Te sentirás por un momento como en aquella escena del restaurante de la película Kill Bill.

Si eres de los que gusta comer al aire libre, aquí puedes hacerlo. Tienen un jardín comunal en el que colocaron una mesa hecha de bambú que resulta perfecta para darte un respiro del caos exterior. También cuentan con un apartado de objetos y alimentos japoneses para que hagas algunas compras antes de partir.