Cuando David Pablos se propuso contar un episodio específico en la historia de la comunidad gay mexicana, tenía claro cómo lo iba a hacer. El resultado fue la película El baile de los 41.

Ser un hombre abiertamente homosexual transformó su visión en el momento de contar la historia. El 18 de noviembre de 1901, en una redada, detuvieron a 41 hombres, algunos de ellos vestidos de mujer. Uno logró evadir a la policía: Ignacio de la Torre y Mier, yerno del presidente Porfirio Díaz y protagonista de la cinta.

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“Sabía cómo mostrar una variedad de masculinidades, cómo es una relación afectiva entre hombres más allá del plano amoroso-sexual”, nos explicó el director mexicano en entrevista.

“Uno de mis principales objetivos era enseñar esa complicidad y hermandad que se puede generar entre hombres que pertenecen a la comunidad gay”.

Por acá, el tráiler de la película El baile de los 41:

Una casualidad detonó la película El baile de los 41

La historia de los 41 llegó casi por casualidad a las manos de David cuando era joven. Su tío Carlos Monsiváis guardaba representaciones de sucesos históricos importantes de México y en esa colección vio una imagen de hombres vestidos de mujer.

El interés por este episodio volvió muchos años después, ahora de la mano de Mónica Revilla, guionista de la película y a quien Pablo reconoce por el apoyo para poder contar esta historia “de manera independiente”.

Pese a ser un incidente en la historia de México de hace más de 100 años, todavía hoy David Pablos encuentra similitudes muy marcadas. La sociedad porfiriana estigmatizó la homosexualidad, pero la de 2020 –agrega– aún se escandaliza por ver una relación amorosa entre hombres llevada a la pantalla por producciones nacionales.

“La película aborda la vida social de la élite porfiriana, pero hay cosas que siguen siendo un claro espejo del México del siglo XXI”, agrega.

“Aún hay un apego al deber ser y a las costumbres y tradiciones”.

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Con la película El baile de los 41 Pablos quiere “mostrar y darles voz a los personajes de la comunidad gay desde un lado humano, que no sea una caricatura y que sea respetuoso”.

Solo así, concluye, mostrando personajes reales que no son héroes y que exponen sus lados vulnerables, será posible romper el tabú de la homosexualidad y el racismo que sigue latente en la sociedad mexicana.

En este video, integrantes de la comunidad transexual chilanga nos hablaron de la discriminación que sufren: