¿Por qué hizo historia?
Hay un anuncio de cerveza que dice que Kinky pasó de no tener género a inventar su propio género. Nosotros no podríamos estar más de acuerdo. Estos norteños no sólo incorporaron elementos electrónicos que nadie había pensado antes en México, sino que también jugaron mucho con elementos autóctonos y, por si fuera poco, exportaron su sonido a todo el mundo. Hoy, la escena del rock nacional no podría entenderse sin ellos.

¿Qué nos gusta de ellos?
Que siempre son auténticos. No importa qué esté sonando en la radio: Kinky siempre va a sonar actual, diferente y francamente muy, muy chido.

¿Qué le cambiaríamos?
Estaría bien ver que influyen a más bandas (cosa que, en todo caso, el Colectivo Nortec sí ha logrado).