La colección definitiva de un título trascendental

07 de octubre de 2016

Destiny es un título que recibió una bienvenida agridulce: muchos lo amaron con ciega fe y otros lo vapulearon (la mayoría movidos por el hype).

La realidad es que Destiny es un gran juego que para muchos no estuvo a la altura de Bungie y del legado de Halo; otra razón de ello es que muchos no entendieron su modo de juego, y se les hizo “aburrido” y “limitado”.

Personalmente te diría que no hagas caso de esos comentarios, y disfrutes de Destiny. Lee aquí mi reseña completa del título.

Entonces, si no le habías dado una oportunidad, ahora es cuando porque acaba de lanzarse La Colección, que incluye el juego principal, la Expansion I: The Dark Below, la Expansion 2: House of Wolves, The Taken King, Rise of Iron y un empuje para tu personaje hasta nivel 40.

He aquí un comentario sobre cada una de estas nuevas características para que te animes (o no) a jugar Destiny:

Expansion 1: The Dark Below

Me decepcionó un poco que la primera expansión no corrigiera los problemas del juego principal, pero por otro lado sí extendió lo mejor de Destiny, lo cual me dice que está dirigida a sus fans y no a los nuevos jugadores.

Si bien las misiones son divertidas (muchas de las del juego principal también lo son), realmente no ofrecen nada nuevo ni ofrecen nada de trama. Hay algunas que son pequeñas pero muy intensas, ésas me gustaron mucho. Sin embargo, las recompensas no son del todo satisfactorias, salvo contadas excepciones.

Hay un evento en particular que pone a dos facciones de enemigos en contra y tú tienes que eliminar un jefe en medio del caos. Te va a encantar.

Es importante que sepas que vas a necesitar un buen nivel para disfrutar al 100% estas misiones (otra señal de que son sólo para fans, pero ya no es tan difícil subir) y que los mapas multiplayer nuevos no están al mismo nivel que los del juego principal.

Expansion 2: House of Wolves

Ésta mejora los errores de la primera, pero aún así sigue presuponiendo demasiado que tienes a una buena banda de amigos con los que juegas. Si no la tienes, o eres forever alone, mejor evítala.

Ahora es mucho más sencillo subir de nivel y el armamento que obtienes es más poderoso desde el inicio. Aún así, los mejores accesorios siguen apareciendo al azar.

Por otro lado, la campaña es mucho más entretenida que la expansión anterior, aunque es muy corta y no tiene una trama interesante. Sin embargo, hay un episodio en particular que te va a encantar, pues el jefe quema todo el escenario y tendrás que mantenerte en el aire para no salir dañado. Si la juegas con amigos, requerirá mucha comunicación, pero es 100% divertida. Los jefes en general son más perros, así que aguas.

Respecto al multiplayer, Trial of Osiris es una joya, pues es un round de 3 v 3 en el que no puedes revivir por ti mismo, sino que dependes de tus amigos. Además, las recompensas son jugosas.

The Taken King

Bungie fue aprendiendo de sus errores y convirtió a The Taken King en algo mucho mejor a lo esperado. Lo primero que vas a notar es que todo el juego es más accesible, no sólo el sistema de loot, sino también la progresión; además las recompensas que obtienes son mucho más satisfactorias. Lo mejor es que ahora puedes llegar a nivel 40 con sólo tu experiencia y no depender de las armaduras.

Otra cosa que mejoró fue la trama, y además los personajes se sienten más vivos. En cuanto a las misiones, tienen más variedad y se sienten menos repetitivas. El combate y los enemigos son más versátiles. Esta expansión le da nueva vida al juego, pero no lo convierte en algo perfecto.

Rise of Iron

Por último, tenemos esta expansión que demuestra nuevas ideas pero no deja de arrastrar los vicios del juego principal.

Lo primero que notarás es que parece que Rise of Iron está ubicado en un mundo de fantasía medieval, lo cual la verdad se ve estupendo y fue muy bien integrado a este título. Pero fuera de los escenarios, la trama no despega y es como un coitus interruptus.

Los mapas son lo mejor de esta expansión, pues son variados y de gran escala, tanto en multiplayer como en campaña, y además tienen rincones bien diseñados que combinan claustrofobia con combate cuerpo a cuerpo.

La mejor misión es la de Wrath of the Machine, no sólo en el trayecto, sino sobre todo en el jefe final, que te hará jugar como nunca antes lo habías hecho (a esto me refería con “nuevas ideas”), Realmente vale mucho la pena.