Siempre polémico, el conductor de televisión Esteban Arce decidió iniciarse en nuevos terrenos y escribió, dirigió y va a estelarizar La vida de un Arce, complejo drama teatral que describe los momentos más importantes de su vida.

En el montaje, que se presume podría estrenarse las primeras fechas de marzo, Arce recuenta pasajes tan memorables como su paso por las fuerzas básicas del Atlante, su difícil camino para convertirse en uno de los más influyentes estudiantes de Relaciones Industriales del país, su apasionada relación con Jorge "El Burro" van Rankin y las tempestades sufridas por ser señalado como un homofóbico, un loco prepotente y prejuicioso por los medios de comunicación.

"O sea, quería dar el otro lado de la historia", comentó éste multifacético personaje, "ha sido muy complicado poder trabajar en un medio donde todos se jactan de ser libres y expresar sus opiniones y no dejan de atacarte si no concuerdas con ellos".

En los últimos tiempos, Arce ha sido sujeto de controversia por sus delcaraciones públicas, notablemente aquellas donde señalaba a la homosexualidad como algo semejante a la "demencia animal" y al Premio Nobel de literatura, José Saramago, como "un verdadero comunista recalcitrante, que no deja de ventilar su cuna comunista; un tipo verdaderamente tendencioso que nada más ha sido premiado por la izquierda internacional."

De diálogos ágiles (como su pluma, la de Arce) y una producción austera pero elegante, La vida de un Arce desbordará las opiniones de los críticos y las salas de teatro en cuanto se estrene; es, a final de cuentas, la vida y obra de uno de los personajes más singulares e influyentes del país, una figura que ha sabido trascender los obstáculos de sus detractores para hacer lo que le nace y para lo que es bueno: pensar, opinar, informar.

Tendremos la primicia.