Específicamente por el Parque Lincoln y calles aledañas. Todo con la idea de pasar una tarde-noche tranquila y comer rico.

Paradas indispensables:
Riedel Wine Bar-Senses-Roxy, Teatro Ángela Peralta.

La ruta a seguir
La travesía comienza en el Paseo más famoso de la ciudad (ojo, que es sólo el pedacito que te lleva a los Campos Elíseos y no recorrer toda la avenida). La recomendación es llegar por esta calle para irte ambientando en la cuestión romántica (para lo que también te recomendamos realizar este tour en fin de semana o ya entrada la noche, así evitas cualquier congestionamiento).

Ya en Campos Elíseos, tú y tu acompañante pueden pasar por el Riedel Wine Bar, detenerse a tomar una copita de vino mientras se deciden ¿picnic en el parque con helado en Roxy o comida casual?

Si la opción es la primera, en Campos Elíseos (justo frente al Hotel Presidente) está la tienda Senses, de la que se pueden llevar desde la botellita de vino hasta los sandwichitos.

Al parque se puede llegar por Julio Verne, que los llevará directo al espejo de agua. Ahí pueden hacer tiempo dándose una vuelta por el aviario o por la galería de arte. Aquí lo que cuenta es tomarse el tiempo para darle la vuelta completa al Parque y hacer un hueco en el estómago.

Si prefieren una comida o cenita casual está el Primo Bacio ¿hay algo más romántico que un restaurante italiano que recuerde a un primero beso? Este es el sitio para comer una pastita, acompañarlo con un vino y disfrutar de la vista hacia el parquecito.

Tip caminero
Si no tienen mucho apetito, la opción es pasar a Da Silva, comprar un pan recién hecho y complementarlo con la mitad.