La fregona Rita Guerrero se nos fue hace cinco años. Mujer multifacética, fue vocalista y compositora de Santa Sabina, actriz, conductora, activista y pon aquí cualquier manifestación artística que se te ocurra. Para conmemorar su legado, les damos 10 razones para amarla.

1. Rita se intentó independizar a los 17 años pero su mamá, una seño harto tradicional, la regresó a su casa. No se desanimó a la primerita de cambio y siguió buscando su propia chuleta. ¿Ven? Ya no sean conchudos: sálganse de la casa de la mamá/tía/abuela/suegra…

2. Eso de ser todóloga(o) es lo de hoy. Ella declaró más de una vez que “todo lo que aprendí me ha servido para lo que hago ahora”. Échenle ganas, aprendan a tocar la flauta (no es albur) y métanse a clasecitas de una nueva lengua (tampoco es albur). Reiventénsen, puesn.

3. Rita, siempre inquieta, mandó a volar al piano (su primera opción) y se decantó por la actuación. Hizo sus pininos en su natal Guadalajara pero se chilanguizó pa’ superarse. Se vino a la ciudad a estudiar en el Centro Universitario de Teatro (CUT) de la Universidad Nacional Autónoma de México. Oséase, que se puso las pilas para hacer realidad sus sueños (se vale retomar lo que realmente les apasiona aunque sea desde el godinazgo).

4. Todo tiene su tiempo pero hay que talonearle (y si tienes amigos chidos que lo hagan contigo, pues qué mejor). Rita combinó el teatro con la música a finales de los ochentas, cuando conoce a Los Psicotrópicos (Poncho Figueroa, Pablo Valero y Jacobo Leiberman). Deciden formar Santa Sabina y a echarle los kilos para salir adelante. La radio no los pelaba, la tele menos. Empezaron a llamar la atención por incorporar elementos teatrales (también veladoras y flores) en sus presentaciones y, sobre todo, por sus canciones con toque jazzístico-gótico-rockero progresivo y letras a las que tienes que echarle coco cuando las escuchas. Tocaban en donde fuera, lugares legendarios (en esa entonces, clandestinos casi casi) como el Rockotitlan, el LUCC (La última carcajada de la cumbancha) y el Tutti Frutti. El resto es historia. Aquí tienen “Nos queremos morir” grabada en uno de sus primeros conciertos:

https://www.youtube.com/watch?v=zke2ajGPAsE

5. Le dijo nel a actuar en telenovelas después de una notable actuación en Martín Garatuza, en la que interpreta a una mujer torturada por la Santa Inquisición. También compartió pantalla con la rockera Cecilia Toussaint. Sus palabras de debut y despedida fueron: “Me sirvió hacer telenovela, pero no me interesó continuar, por sus rollos de manipulación y porque la creatividad del actor se deteriora. ¿Por qué? Porque se hace en chinga y por el encasillamiento que sufre el actor”. Está chido decir niguas cuando algo nomás no te late chocolate.

6. Deja de clavarte, no le saques a lo que no conoces y aplica la de “El camino es el deseo” (Avanzo / el camino es el deseo… Lo que no llegará / no me detiene). Las inquietudes artísticas hicieron voltear a Rita hacia el cine. Ella misma cuenta que la dura formación en el teatro fue aleccionadora “porque de ahí partí, sin látigo, a hacer otras cosas; sin nada más que mi propia disciplina”. Entonces, Rita hizo cine. Con pelis como Ciudad de ciegos, ganó un Ariel por mejor tema musical (interpretado por Santa Sabina con Saul Hernández y Sax de la Maldita Vecindad).

7. Santa Sabina firmó con BMG y se internacionalizó en los noventas. Con Adrian Belew, guitarrista de la banda King Crimson, grabaron el excelente “Símbolos” e hicieron MTV Unplugged.

https://www.youtube.com/watch?v=-j0ydCShGZ8

Santa Sabina le dio gas a la disquera por querer hacerlos más comerciales. Se mantuvieron leales a sus principios (musicales) y les fue poca madre. Rita Guerrero no olvido sus raíces y con su banda realizaban “Ofrendas musicales” para festejar el Día de Muertos. Ya ni la amuelas, sal de tu delegación y conoce más allá de las cinco cuadras a las que te limitas el finde, pero tampoco te creas gringo de segunda.

8. Activista de hueso colorado, Rita Guerrero se metió a un taller de teatro en la prepa y se fue de gira por varias comunidades para “llevar el arte al pueblo”. Participó en la huelga de la UNAM en 1987 e hizo conciertos de apoyo para el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Con Santa Sabina, se unió a colectivos musicales que repartían víveres en comunidades indígenas.

9. Es un claro ejemplo de Girl Power! Un ejemplo: Rita declaraba que el amor físico, oséase el sexo, “es una parte vital que se tiene que practicar y disfrutar, no tener prejuicio… es difícil para las mujeres, ya que las educan con muchos tabúes… pero, luego los hombres son medio cabrones, porque aunque a veces se sienten liberales, el hecho de que también las chavas disfrutemos y nos guste, como que no lo aceptan muy bien”.

10. Ella nos enseñó a no rajarse y aguantar vara. Rita le hizo honor a su apellido hasta el último momento de su estancia, aquí, en la Tierra: “Como dice Don Juan, todos tenemos las mismas posibilidades de que cada momento sea ‘nuestra última batalla”.

¡No te olvidamos Rita! Y a ustedes, ¿qué más razones se les ocurren para amar a esta grande?


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