Dice Javier Cercas que él se pone “al servicio del libro, al servicio de lo que quiero contar”. En El impostor (Penguin Random House), una novela sin ficción o un relato real como él le llama, quiso contar la historia de Enric Marco, un octogenario español que durante años se hizo pasar por superviviente de un campo de concentración nazi hasta que en 2005 un historiador ató cabos y descubrió su impostura.

A Cercas, un escritor cuya fama se disparó a partir de su novela Soldados de Salamina (2001), le atrajo el tema desde ese momento. Escribió un artículo en el periódico El País y anduvo dándole vueltas al tema. Abandonó la idea del libro ese mismo año y luego en 2009, hasta que la retomó en 2013. Y convenció a Marco, ya nonagenario, para que hablara con él.

84751Javier Cercas

Javier Cercas (Getty Images)

“¿Para qué iba a inventarme nada si este hombre ya se había inventado todo? Lo que tenía que hacer era poner a dialogar la ficción y la realidad, la mentira y la verdad. Eso sí lo tuve clarísimo desde el principio”, dice el escritor español en entrevista.

Antes de Soldados de Salamina, explica Cercas, la historia no desempeñaba ningún papel en sus libros. Pero a partir de esa novela en la que un periodista investiga la historia de Rafael Sánchez Mazas, un falangista al que los republicanos perdonan la vida al final de la Guerra Civil española, se vuelve fundamental en sus tramas.

“Pero si alguien dice que yo escribo novelas históricas, me entran ganas de cortarle la cabeza. Mis libros no tratan de la historia. Mis libros hablan de la relación entre el pasado y el presente”.

Y en El impostor eso es evidente: al reconstruir la vida y la historia de Enric Marco, contraponiendo los hechos con los dichos de este hombre, Cercas va asomándose a la historia. “Cuando estalla el escándalo, 10 años atrás casi, yo inmediatamente siento que hay algo que me atañe profundamente. Me pregunté: ¿cómo es posible que un tipo mienta sobre el crimen más monstruoso de la humanidad?, ¿cómo es posible que todo el mundo se crea la mentira de este tipo durante tanto tiempo?,¿qué carajo hay en este tipo que me afecta tanto, que me inquieta tanto, que hace que lo sienta en las tripas?”.

Cercas resuelve esos cuestionamientos a lo largo de 425 páginas, con intensidad y buenas dosis de tensiones. Cuenta todo en primera persona, sin esconder sus dudas y temores pues, al fin y al cabo, como él mismo dice, no ha dejado de ser un escritor posmoderno.