El Estadio Azteca, el Olímpico Universitario y el Azul —o cualquier estadio en el país— podrían quedar vacíos, si la gente sigue gritando “¡eh puto!” cada vez que el portero hace un saque de meta.

El nuevo reglamento de la Liga MX aplicará tres pasos para forzar a los asistentes a evitar este comportamiento. El paso 1 será parar el partido para indicar, a través de altavoces, que se detectó una conducta racista; el paso 2, tras un nuevo grito, será frenar por 10 o 15 minutos para reafirmar la advertencia; en el paso 3, si la afición continúa, se desalojará el estadio y el partido se reanudará sin gente.

Justo este fin de semana arranca el torneo Apertura 2017, así que ya podríamos ver en acción las nuevas reglas en el América-Querétaro y el Pumas-Pachuca —hablando de la CDMX—.

Veremos si después de varias advertencias por parte de FIFA y la fuerte sanción que se podría aplicar, los aficionados dejan de gritar.

¿Ustedes creen que funcionará?