Tecnología nueva que nos agarró a todos por sorpresa. Se inflaba la lengüeta y todo el tenis quedaba ajustado y listo para jugar. En el salón hacías la broma de inflarlos todos, sacar el aire y decir que alguien se había tirado uno al escuchar el "psssssssss". Anécdota freak: Dee Brown los infló antes de su clavada ganadora en el Slam Dunk del 91. (Ve el video acá abajo, el lugar 8 es la clavada ganadora de Dee Brown).