¿Cuál es la hora en que los mexicanos son más infieles?
Por: Colaborador
Si sospechas que tu pareja te pone los cuernos, seguramente te pones a temblar los viernes por la noche, cuando, casualmente, te mandará un mensaje en el que diga que debe quedarse otro rato en la oficina, pues le agendaron una cita “im-por-tan-tí-si-ma”.
Probablemente sea verdad. Quizá su jefe sea un tirano al que se le ocurre organizar juntas justo cuando todos van de salida.
Claro, esto no significa que tu pareja no te sea infiel, sino que los horarios en los que se encuentra con su segundo frente no son precisamente los que tú creías. ¿Quieres saber la cruel verdad? Prepara los pañuelos, el bote de helado y continúa leyendo:
¿Nos echamos unos palitos de queso?
Ahora bien, si ves que prepara meticulosamente su recipiente y que incluye un poco de comida extra, ¡suda! La red social para personas comprometidas que buscan echarse una canita al aire, Second Love, hizo un análisis entre los más de 200 mil usuarios que tiene en México para saber cuál es la hora chimengüenchona.
Encontró que los pillines se conectan mayormente entre las 13 y las 15 horas, lo cual coincide con el horario del almuerzo godín. Principalmente lo hacen a través de su smartphone, otros más lo hacen mediante sus computadoras de escritorio, laptops, tables, smart TV y consolas de videojuegos.
“En el horario de almuerzo, quizás por estar menos pendiente de obligaciones y reuniones, se observa una mayor conexión de usuarios mexicanos”, asegura en un comunicado Matías Lamouret, vocero de Second Love para Latinoamérica.
Posteriormente, se conectan a última hora por la tarde para concretar las citas.
¿Quiénes son los que más hacen esto?
Pues deben saber que las mexicanas son de las que más se conectan a esta plataforma. La mayoría tiene 40 años y lo hacen porque en su casa no les dan servicio de afinación y mantenimiento o simplemente porque quieren cumplir una fantasía sexual. Así de simple.
¿Quieren saber más sobre estos corneadores? Ok, no dejen de leer:
Según Ashley Madison, otro portal para que la gente casada tenga una aventurilla, las ciudades que tienen más infieles son: CDMX, Guadalajara, Monterrey y Tijuana. Los más tranquilitos de la República están ubicados en: Gómez Palacio, Tampico, Matamoros, Ixtapaluca y Ensenada.
Pero no te preocupes, hay formas en las que puedes saber si tu pareja te es infiel sin necesidad de andar checando su celular o sus correos.
El venado durmiente
Este portal hizo un estudio para evaluar el comportamiento de los infieles y llegaron a una conclusión: ellos duermen del lado derecho de la cama.
Los resultados de una encuesta realizada a más de 76 mil personas en 27 países revelaron que el 56 por ciento de las mujeres y el 54 por ciento de los hombres que duermen de ese lado le pone el cuerno a sus parejas.
Otro dato relevante es que los hombres se sienten un poco más culpables que las mujeres cuando le son infieles a sus parejas. El 19 por ciento de ellos y el siete por ciento de ellas sienten remordimientos después de tener un encuentro con su segundo frente. O sea, tampoco crean que todos se sienten culpables, sólo unos cuantos.
Y bueno, ningún mes se van invictos. El 91 por ciento de los hombres y el 93 por ciento de las mujeres asegura que han visto a sus amantes por lo menos una vez al mes.
¿Los motivos? Los mismos de siempre: falta de sexo o contacto íntimo en la relación formal, falta de atracción física, de deseo y de excitación. Eso sí, el 64 por ciento de los hombres y el 78 por ciento de las mujeres dicen que haber tenido una infidelidad tuvo efectos positivos en sus relaciones de pareja.
¿Ven? No en vano les compartimos constantemente diferentes ideas para meterle variedad a la relación. La monotonía y la falta de sorpresa hacen que las parejas quieran volar a otros cielos y dejar abierta la jaula para que caiga otro gorrión.
Así que pónganse buzos, no teman probar nuevas posiciones, hacerlo en lugares diferentes o usar algún juguete sexual durante el cadereo. Verán cómo esto influye positivamente en su vida sexual sin que tengan que recurrir a un tercero.