La gran diferencia entre Lady Gaga y las anteriores es la aprobación que recibe tanto de la crítica mainstream como de la alternativa. En su corta carrera, la cantante se ha ganado flores y aplausos de publicaciones que normalmente no son tan amables con la música pop. Puede estar en el festival de la radio popular local e igualmente presentarse en festivales tan icónicos como Glastonbury o Lollapalooza. Particularmente, su segundo álbum The Fame Monster le ha otorgado la aprobación de los críticos más estrictos.

Es imposible negar que Lady Gaga es uno de los personajes del momento. Una máquina muy bien diseñada, apoyada por algunas de las mejores canciones pop de los últimos años y con una ambición como pocas (algo así como las fembots asesinas de Austin Powers). Gaga ha logrado el éxito que muchos desean pero pocos logran, ahora habrá que ver si logra mantenerse o caerá como las estrellas pop que llegaron antes que ella.