Una prohibición había terminado. La llamada “Toddler’s Truce”, en donde la televisión salía del aire de 6 a 7 pm para poner a los infantes a dormir —engañándolos de que las transmisiones televisivas habían terminado—, llegaba a su fin con un show al que titularon The Six-Five Special.

El título era por una simple razón, el programa saldría al aire a las 6:05 pm después de las noticias. Y aunque originalmente el programa sólo estuvo planeado para durar 6 semanas, el éxito fue tal, que duró un año al aire. ¿Qué tiene de maravilloso esto? The Six-Five Special fue el primer programa televisivo de rock & roll.

En 1957, el rock & roll estaba en pañales en la Gran Bretaña. El género que inventaron los norteamericanos y que perfeccionaron los ingleses aún no tenía a los grandes exponentes de la década venidera. John Lennon aún no era una figura, Mick Jagger no era un símbolo sexual y Jimmy Page apenas tenía 14 años.

Sin embargo, las juventudes ya se alborotaban por el nuevo ritmo. La salvajada y lo impúdico de agitar las caderas y cuerpecitos, todavía eran mal vistos por una generación que había crecido más con géneros como el jazz o la música de acordeón (sí, publicaciones como la NME —originalmente Accordion Times and Musical Express de hecho se fundaron para escribir sobre el acordeón y otros géneros), todavía no veían al rock & roll como algo para tomar en serio, y nomás creían que era una tonta moda de la juventud.

El tiempo los haría tragarse sus palabras. Una revolución había llegado y la BBC tenía que ocupar el espacio de 6 a 7 los sábados, preferentemente con algo barato y funcional. Entonces surgió la idea de un programa de revista musical, algo fresco en donde el público asistente pudiera bailar escuchando música en vivo. El título tentativo sería Start the Night Right. 1000 libras esterlinas —que incluso para la época era un presupuesto bajo para un programa de televisión— era con lo que contaban los productores. El presentador de Radio Luxembourg Pete Murray fue contratado como conductor junto a Josephine Douglas, quien también era co-productora. Y así comenzó.

Como era de esperarse, el bajo presupuesto asignado hacía imposible traer a las grandes estrellas del rock & roll americano, por lo que los artistas británicos eran los que tocaban en vivo, interpretando covers de sus colegas del otro continente. El baile y la interacción de los jóvenes en vivo, era algo que nunca se había visto en la televisión, e inmediatamente causó sensación. Además del formato de música en vivo, el show también incluía un pedacito de alguna película, una sección deportiva normalmente presentada por el boxeador Freddie Mills y una entrevista. Un formato que a la fecha, sigue siendo efectivo.

Entre los artistas que se presentaron en el programa, se encuentran Petula Clark, el recurrente Jim Dale —quien además era el narrador de la bonita serie Pushing Daisies—, Jimmy Lloyd y el que es considerado como el primer ídolo del rock & roll británico: Tommy Steele. Asimismo, la banda “de casa” eran los Don Lang & His Frantic Five quienes también interpretaban el característico tema de entrada.

Un año después, en 1958 el programa vería su fin, pero ya estaba escrita la historia, The Six-Five Special fue el primer programa de rock & roll televisivo y a 58 años de su estreno, se sigue agradeciendo su aparición, pues sentaría las bases para otro programas y además, ayudaría a popularizar un género que daría vida a la música moderna, a los artistas que se convertirían en leyenda y le brindaría voz y presencia a una generación que se moría por revitalizar la vida como se conocía.