The Sims es uno de los clásicos de los videojuegos y punto. Se trata del estándar en cuanto a simuladores de la vida real se refiere (aunque claro que hay muchas cosas muy chistosas que más bien son de ciencia ficción, así como representaciones graciosas de la realidad, por ejemplo: la muerte) y nos tiene acostumbrados a mejorar en todos los aspectos cada que hay una nueva edición o expansión.

The Sims 4 no es la excepción, pero en comparación con su antecesor se queda muy corto en cuanto a lo que podemos hacer o tener en él. Vamos por partes.

Si ésta es la primera vez que jugarás un The Sims debes saber que tienes que clavarte varias horas para poder disfrutarlo y entenderlo. Esto no es una novedad, además se agradece que Maxis se preocupe por que el juego sea amigable para los novatos. Es por eso que puedes comenzar a crear tu personaje (o a tu mini mí) de inmediato y de manera muy intuitiva.

Es un acierto que la apariencia de los personajes esté tan ligada con su actitud y esto será un deleite para ti porque tienes más libertad (y más lógica) a la hora de crearlos casi exactamente como te los habías imaginado. Y aunque ahora puedes elegir menos rasgos para ellos, sus emociones tan variadas lo compensan.79223

Emociones y rasgos se complementan muy bien, creando personajes muy lógicos que hasta te sorprenderán de lo inteligentes que pueden llegar a ser en ocasiones. Esto se traduce en más variaciones en las reacciones que tienen al enfrentarse a las diversas situaciones. Ver este tipo de cosas es un deleite, sobre todo gracias al nuevo multitasking.

Otro punto a favor es la facilidad con la que puedes construir de todo: casas, muebles, paredes, etc. Y no sólo eso, sino que puedes mover cuartos enteros para hacer tu casa como se te dé la gana. Nada más que no podrás hacer sótanos ni garajes, ¿eh?

Fuera de ello, The Sims 4 exhibe la estrategia de EA para hacerte querer más pero no dártelo hasta las expansiones. ¿A qué me refiero? Por ejemplo a que el mundo en este título se siente más limitado respecto al anterior: los espacios son pequeños y cada que quieras ir a otro te tendrás que enfrentar a pantallas de carga que no molestan por su duración, sino por la cantidad. Todo ello provoca que el mundo de The Sims 4 se sienta limitado, aunque no lo sea. Además el flujo de las vidas de tus Sims se verá interrumpido.

Por otro lado, no hay tanta variedad en los lugares a visitar entre los vecindarios y ciertas omisiones simplemente decepcionan: ¿por qué no hay autos ni albercas ni patrones para decorar tus creaciones como en otras ediciones? ¿No que éste es un simulador de la vida real? Probablemente EA decidirá sacar este tipo de cosas en una expansión más adelante.

Sin duda, este juego se siente como dos pasos para atrás y uno para adelante: aunque ofrece profundidad en las interacciones entre los Sims y en la creación de personajes, se siente incompleto y disminuido respecto a la tercera entrega. Ojalá que estos detalles se mejoren más adelante.

Calificación: 3 de 5

+ Comenzar a jugar es sencillo e intuitivo
+ Profundidad en las interacciones entre personajes
+ Facilidad para construir todo tipo de objetos y ponerlos donde quieras
+ La combinación entre emociones y rasgos provoca mucha variedad en reacciones

– Se siente incompleto respecto a la entrega anterior
– Es limitado en sus espacios, por lo que se limitan la jugabilidad y las actividades de los Sims

The Sims 4
Desarrolla: Maxis
Publica: EA
Consolas: PC, iOS
Clasificación: T para adolescentes
Salida: 2 de septiembre 2014