¿De qué va?
El tráfico de armas, o sea, la venta a granel y sin registro, es un delito oficial desde ahora. Charlton Heston se retuerce en su tumba.

En realidad, ¿eso qué cambia?
Supongamos que hay un grupo estadounidense o centroamericano con intereses en el narco mexicano. Supongamos que ese grupo le da armas al narco (o a la guerrilla, o a la Rebelión). Bueno: eso ya está oficialmente penado, cosa que antes no.

¿Y a mí qué?
Pues, a menos que pertenezcas a una organización ilícita, o que tu negocio sea la venta ilegal de municiones, no pasa nada. Salvo porque ahora, dicen, el narco no tendrá la misma capacidad letal.