Soy de la teoría que si Gatorade cambia el foco de sus
campañas y en vez de hacerlas para hidratar y reponer deportistas le habla a la
banda cruda, sus ventas se irían por los cielos.

en vez de hacerlas para hidratar y reponer deportistas le habla a la banda cruda, sus ventas se irían por los cielos.

Ahora sí el agua no tiene nada que hacer, no hay nada tan
delicioso como un Gatorade enorme y bien frío cuando tienes toda la garganta
seca por andar de alcoholiquito en lunes. Desafortunadamente, traer un Gatorade
en la mano es el cartel universal de "Estoy crudísimo" pero eso qué, no me
importa lo que los demás piensen de ustedes, me importa que no la pasen tan
mal.

Tomen Gatorade, tomen
Powerade, tomen lo que sea, menos shots de whisky o el refresco con el que se
ahogaron la noche anterior.