¿O sea, cómo?

No necesariamente tienes que gastar más; de lo que se trata es de ir más seguido al súper. Olvídate de la tienda de la esquina: lo de hoy es ir a los supermercados con potentísimo aire acondicionado a comprar tus monchis de media tarde. Luego, el pan de la noche. Luego, ups, se te olvidó la leche. Ah, otra vez vamos por los cigarros. De lo que se trata es de ir a cada rato y refrescarte.

¿Y por qué haría esto?

Porque, duh, en el súper hay aire acondicionado, ¿qué más razones que esas necesitas? Te sugerimos la frescura del departamento de frutas y verduras.

Contracalorómetro

9.8