Científicos de la Universidad de Hertfordshire investigaron dos lugares “supuestamente encantados”: el Palacio de Hampton Court, en Inglaterra y las criptas de South Bridge, en Escocia. En ambos sitios, un poco menos de la mitad detectaron experiencias extrañas. ¿Fantasmas? Los fenómenos extraños en ambos lugares fueron localizados en zonas con variaciones en el campo magnético y en la iluminación, respectivamente. Se concluyó que “los lugares encantados no son en sí una prueba de actividad fantasmal, sino más bien de la respuesta de las personas a factores ambientales normales”.