La inglesa:
De toque privilegiado, dueña de las pasarelas por tres décadas. A pesar de una pausa por culpa del doping… su fama y su pasado hablan por ella.

La norteamericana:
Parte del tridente goleador "Destiny’s Child" ahora en solitario no ha dejado de quebrar caderas al ritmo de rap y pop barato. Sus curvas en el área chica son memorables.