¿Quién es el culpable?

El Felpas, que incluso luego los compraba congelados en el Walmart

¿Por qué es tan placentero?

Hablando como gourmet, porque el maridaje agridulce del duro helado de espuma de limón contrasta con el sabor galletoso de la cubierta.

¿Y la culpa de dónde?

Porque trae los recuerdos del terruño para todo aquel que haya crecido en el suburbio (en el caso del Felpas, en Satélite). Porque tiene todas las calorías del mundo, pero se siente light. Porque es como las canciones pop: te gustan a la primera, pero te vuelves fan luego de haberla escuchado 50 veces. Si eres fan del Pay Helado de Vips debes admitir que vas más veces al Vips de las que te gustaría admitir.