Previo a la locura de los tenis de basket, los Adidas Originals, los Nike Air Force One y los Puma que todos traen, hubo muchos diseños por los que nos volvíamos locos de niños. Tenis que nos importaba un pepino si combinaban o no con nuestra ropa y que siempre recordaremos con mucho cariño… y tal vez también con algo de penita.

Así que desempolven sus recuerdos, vean sus pies –pensando que eran mucho más divertidos cuando tenían 7 o 10 años– y preparen su odio para comentar cuáles me faltaron… o cuando vean unos que probablemente sólo conozca yo.

Cambien sus agujetas por velcros, escúpanle a sus zapatos ortopédicos y denle a siguiente.