¿Y éste qué?
El maguito favorito de los domingos por la mañana. El mago Frank, su alegre barba á la Lincoln y su fiel escudero, el conejo Blas, salían a alegrarnos las mañanas, para beneplácito de nuestros padres, que no tenían que pagar niñera para crudear a gusto. Después lo hicieron en Los Comediantes (de manera mucho menos entrañable, más “pícara”, como le dicen los comediantes de Televisa).

¿Cuál es su poder mágico?
A ver, tratemos de ser los menos prosaicos en esto: para los que no sabían, el conejo Blas es un títere de peluche (lo siento, chavos… ¿ah, que no advertimos el spoiler?). Entonces, bueno, digamos que el mago Frank le mete la mano al peluche en la parte baja de atrás. Eso, e imitar voces, son sus poderes mágicos. Pero sobre todo meter la mano.

¿Cómo vencería a Harry Potter?
Con el punto anterior, imagínate…